El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), Manuel Bellido, reaccionó ayer a las acusaciones vertidas por parte de la escuela pública hacia la «intencionalidad» de la Justicia con varios temas educativos y llamó a la «reflexión» y al «sosiego». Bellido recordó que corresponde a los jueces «resolver sobre la legalidad de la actuación de la Administración y que lo hacen según criterios jurídicos», dijo tras las insinuaciones por parte de colectivos y portavoces políticos de que hay «un gobierno en la sombra» que actúa en el TSJA.

Así, insistió en que conforme a la Constitución Española la actuación judicial no puede ser considerada «una intromisión» y constituye una «garantía esencial» para la defensa de los derechos de la ciudadanía. Bellido precisó que los jueces resuelven «según criterios jurídicos y de legalidad, y no por razones ideológicas o de oportunidad», por lo que consideró que la crítica de las resoluciones judiciales, perfectamente legítima, «debe efectuarse con esos mismos criterios, evitando etiquetar el trabajo judicial apelando a estándares ideológicos o políticos».

La denuncia de la escuela pública se hizo tras las últimas decisiones respecto a las aulas concertadas, aunque también apuntaron a los casos del Ánfora, las horas de Religión o los currículos. Según Bellido, con este tipo de conductas lo único que se consigue es «introducir dudas» sobre la legitimidad de las resoluciones judiciales.

Además recomendó a los cargos públicos que no olviden que una democracia se sustenta en un «delicado equilibrio» de poderes y que la deslegitimación de cualquiera de ellos afecta a la confianza que la ciudadanía tiene en el conjunto del sistema.

«Todos los que tenemos responsabilidades institucionales debemos actuar con altura de miras, pensando en el bien común y no en los propios y coyunturales intereses, evitando trasladar a los tribunales la contienda política», sentenció el presidente del TSJA.