Daniel Pérez Berlanga, el hombre que ha empotrado su coche contra la sede del PP en Madrid, es soltero, tiene 37 años vive en Bronchales (Teruel). El alcalde de la localidad, Francisco Nache, de Chunta Aragonesista, ha explicado que es un "chico absolutamente normal". El joven procede de una familia "absolutamente normal", que no aparentaba tener "graves problemas económicos", aunque él sí "llevaba unos años en paro", ha añadido Nache, que vive cerca de la casa de Pérez.

Hace cuatro años el detenido trabajaba en una fábrica de madera en Cella, otro pueblo de Teruel, y no consta que haya tenido empresa alguna. El alcalde, que tiene un año menos que Pérez Berlanga, ve al joven con frecuencia por la localidad. "Vivimos en un pueblo pequeño, de algo más de 400 habitantes" ha dicho para agregar que aunque apenas salía, "sí lo conocía".

El padre del detenido, Juan Pedro Pérez, fue alcalde de Bronchales del 2003 al 2007 por el PSOE, aunque Pérez Berlanga "no tenía ningún vinculo con la política", ha afirmado el alcalde, que no se explica lo que ha pasado: "Aunque la gente está descontenta en general con la situación económica, independientemente del partido que gobierne, no entiendo qué ha pasado", ha afirmado.

Los vecinos del pueblo están consternados por lo que ha ocurrido y tampoco se explica que le ha podido pasar. Sus padres son trabajadores, los dos tienen empleo y no aparentan problemas económicos. Cuando ha sido detenido, Pérez Berlanga ha dicho a la policía que lo había perdido todo.

"Estamos en estado de shock, no sabemos qué decir", ha dicho a un vecino del pueblo, que sólo tiene 427 habitantes y que han despertado hoy con toda su atención puesta en las televisiones y radios que informan de lo ocurrido en la capital de España.

"Todos lo conocemos", ha declarado otro de los habitantes del pueblo, quien ha definido lo ocurrido como "algo inexplicable", ha rechazado que tuviera problemas psiquiátricos o de otro tipo y han enfatizado que "es un chico normal" y que no es empresario, como se ha dicho.

Este vecino, que vive muy cerca de las casa familiar en la que vive el joven detenido, ha insistido en que "es una persona normal", que se quedó en paro hace más de dos años.

"Es inexplicable", ha insistido, antes de señalar que sólo cabe pensar que ha sido todo fruto de un "ataque de locura", "sin ninguna intención", ya que "lo veo incapaz de hacer una cosa como esta". Ha descrito al joven como amable, simpático, "nada problemático en absoluto", si bien "no era muy hablador" y "no salía mucho", "apenas iba de fiesta", sin que haya protagonizado en el pueblo ningún incidente.

A los vecinos "no nos cabe en la cabeza" lo que ha hecho en la sede del Partido Popular, ha añadido este vecino, quien ha reconocido que hay mucha gente desesperada y que cuando se lleva tiempo en el paro "se da muchas vueltas a la cabeza".

"No sabemos ni qué decir", ha resumido el parecer de los vecinos de este pueblo de la Sierra de Albarracín, que se encuentra a 1.500 metros de altitud, a unos 55 kilómetros de Teruel capital, y que se dedica a la agricultura y la ganadería.