El equipo de la Unidad de Arritmias del hospital Clínico se ha convertido en uno de los principales centros a nivel nacional en ofrecer una técnica especializada que aporta numerosos beneficios a los pacientes que necesitan un marcapasos. En concreto, fue a a principios del pasado año cuando aplicaron una novedosa técnica de estimulación cardíaca, conocida como la estimulación del área de la rama izquierda encuadrada dentro de la estimulación fisiológica. A lo largo del año han desarrollado ampliamente la fórmula de tal forma que ya se han beneficiado de esta terapia pionera más de 150 pacientes.

A largo plazo, el problema de los marcapasos con estimulación convencional (no fisiológica) es que pueden disminuir la fuerza del corazón produciendo insuficiencia cardíaca e incrementando el riesgo de arritmias. Entre los beneficios de esta nueva técnica, que consiste en el implante de un marcapasos que estimula el corazón de forma fisiológica, figuran el prevenir, a los pacientes portadores del mismo, el desarrollo de arritmias como fibrilación auricular así como evitar el desarrollo de insuficiencia cardíaca, disminuyendo así las hospitalizaciones y la mortalidad con respecto a los usuarios de marcapasos convencionales.

Además de presentarse como la primera opción de tratamiento en pacientes con bloqueos cardíacos, los últimos estudios científicos la sitúan como una gran opción para pacientes que precisan una resincronización cardíaca por haber perdido la sincronía del corazón al presentar un bloqueo de alguna de las ramas que conducen la electricidad de forma habitual. También para quienes tienen un corazón que presenta disfunción ventricular, es decir que ha perdido parte de su fuerza contráctil.

El doctor Ramos Maqueda, responsable de la Unidad de Arritmias del Clínico, comenta que ya han iniciado varios proyectos de investigación a través del Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón (IISA) y que ya van publicando varios artículos al respecto con la intención de divulgar la técnica a nivel nacional e internacional. Además, con esa misma intención han contribuido a la formación de al menos cinco centros a nivel nacional ubicados en Zaragoza, Madrid, Lérida, Vizcaya y Barcelona.