Díficil ejercer su función de velar por los espacios naturales del entorno de Zaragoza cuando sus miembros carecen de vehículos en los que desplazarse: los cuatro están en el taller. Y, coincidencia o ley de Murphy, en el periodo de mayor riesgo de incendios. La falta de renovación del principal material de trabajo se notará más con la llegada de más agentes en septiembre. El nuevo gobierno municipal debería tomar nota si realmente quiere prevenir.