El sindicato policial Unipe ha denunciado hoy la tardanza del ayuntamiento de Zaragoza y de la Delegación del Gobierno en Aragón en prohibir el concierto de música RAC (Rock Agains Capitalism) que el pasado sábado acabó en altercados, con 13 detenidos y cinco policías heridos.

En un comunicado, Unipe critica la tardanza de las autoridades locales y de la Delegación del Gobierno, en última instancia, para prohibir este tipo de actos "contrarios al orden público y la paz social por las que siempre acaban resultando heridos policías de las unidades encargadas de velar por la seguridad ciudadana".

El concierto se celebró la noche del pasado sábado en un edificio de la calle Compromiso de Caspe sin incidentes, pero un grupo de unas 150 personas de ideología antifascista, provistas de palos, patatas con clavos, piedras o adoquines se abalanzaron contra los agentes de Policía que se encontraban en el exterior del inmueble, cuando los asistentes salían del concierto.

Este sindicado policial lamenta la "incompetencia" de los responsables políticos, "que no deciden a tiempo cuando para eso están al servicio público y se les paga por ello".