El Consejo de Gobierno de la Universidad de Zaragoza ha aprobado hoy por unanimidad una declaración en la que pide un modelo estable de financiación para evitar el "colapso" y al Gobierno de Aragón, los partidos y los ciudadanos que apuesten por la institución como motor del futuro de la comunidad.
"Conscientes de los sacrificios exigidos a los ciudadanos y de la actual escasez de recursos, desde la constatada vocación solidaria de nuestra Universidad, reivindicamos -dice la declaración- una adecuada financiación pactada por todas las fuerzas políticas".
A su juicio, "debe ser comprendida como una inversión necesaria para el futuro de Aragón, pues solo profundizando en la sociedad del conocimiento podremos dar respuesta a la crisis económica actual".
Tras mostrar su apoyo al rector, Manuel López, el Consejo pide al Gobierno de Aragón, partidos políticos y ciudadanos "que atiendan esta petición y hagan una apuesta en firme" por la Universidad "recuperando del diálogo, para alcanzar un pacto estable, que permita satisfacer sus necesidades fundamentales, evitar el colapso y programar sus actuaciones".
La deficiente financiación la sitúa "en el penúltimo lugar entre las universidades publicas españolas y "la ausencia del modelo de financiación" dificulta la gestión ordinaria, impide planificar a medio y largo plazo y compromete su función transformadora, añade el texto.
El órgano de gobierno recuerda que la Universidad de Zaragoza ofrece formación superior a más de 30.000 estudiantes españoles y extranjeros, compite con notable éxito en la captación de recursos de investigación nacionales y europeos, y colabora activamente en los desarrollos e innovación de decenas de empresas.
Tras resaltar que algunas de sus áreas de conocimiento "se cuentan entre las mejor valoradas a escala nacional e internacional" y que se encuentra "entre las 500 mejores universidades del mundo", remarca que la institución académica "juega un papel esencial en la vertebración del territorio aragonés y en la creación de un tejido social formado, crítico y con valores cívicos.
Todas estas actividades, según la declaración, se sostienen "por el trabajo de más de 4.000 profesionales altamente cualificados "aquejados por tasas de reposición que impiden su necesaria su renovación, con infraestructuras cada vez más obsoletas por falta de mantenimiento y ausencia de inversiones nuevas, y con una política de tasas elevadas que no favorece el acceso a la enseñanza".
Esta declaración se hace pública después de que la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, dijera ayer que era "muy consciente" de que la Universidad puede necesitar más recursos pero también los necesita la Sanidad, la Educación, el ingreso aragonés de inserción, o la dependencia". "Los recursos son los que son", resaltó.
Sobre este asunto, el portavoz del PP en las Cortes, Antonio Torres, ha dicho hoy que "quien tiene que ser solidario con los aragoneses es la Universidad y no los aragoneses con la Universidad".
