La tendencia al consumo de dos o más drogas juntas entre los estudiantes de 14 a 18 años que cursan Secundaria en Aragón no pasa desapercibida y, según la encuesta Estudes publicada ayer, uno de cada tres jóvenes de la comunidad (más del 33%) ha practicado el policonsumo en el último mes. En esta acción se considera que los menores toman, en una misma ingesta, sustancias psicoactivas como alcohol, tabaco, cannabis, hipnosedantes o anfetaminas.

Asimismo, el 50,4% de los estudiantes aragoneses confiesa haber realizado policonsumo alguna vez en la vida, el 34,8% solo ha tomado una sustancia y el 14,7% no realizó ningún tipo de toma. El consumo de drogas juntas, según el estudio, es mas elevado en Aragón que en España, donde la media es del 48,3%.

Por otro lado, son las aragonesas las más propensas a realizar esta práctica (un 44,8% frente al 43,8% en ellos), también por encima de la media nacional. Respecto a la edad, el policonsumo aumenta con la edad, con dos o más sustancias en un 29,7% de los jóvenes aragoneses de 14 años y hasta un 47,1% en los de 15 años. Después, tal y como refleja la encuesta, se reduce ligeramente a un 46,9%, pero vuelve a aumentar hasta un 52,9% en los de 17 años y alcanza su punto máximo con un 54,9% en la mayoría de edad.

TRES PORROS DIARIOS

Por otro lado, el consumo de cannabis sigue disminuyendo en Aragón y, por primera vez, los porcentajes se sitúan por debajo de la media nacional. Así, casi el 30,7% de los encuestados confiesa haber probado el cannabis en alguna ocasión (31,1% en el 2014) y el 17,9% en el último mes (18,9% en 2014). «Es la tercera droga más tomada y nos preocupa, pero se aprecia una consolidación de la tendencia a la baja», señaló ayer Francisco Javier Falo, director general de Salud Pública.

En cuanto a la cantidad de consumo, un estudiante se ha fumado 3 porros de media de cannabis en el último mes. Así, el 60,3% de los consumidores indica que ha sido principalmente marihuana y el 34,6% reconoce una toma conjunta de marihuana y de hachís. Por otro lado, la mayor parte de los jóvenes de la comunidad, un 84,4%, asegura haber combinado a la vez cannabis y tabaco.

El documento de Estudes incluye varias novedades en su nueva edición. Por un lado, por primera vez la encuesta preguntó por el modo de consumo del cannabis, siendo el porro o canuto la forma más extendida por el 98,8% de los jóvenes aragoneses, seguido del uso de pipas de agua, cachimbas o shishas. Por otro, se incluyó una cuestión sobre la legalidad del cannabis. En el supuesto de que el consumo de hachís o marihuana fuese legal, el 59,9% de los jóvenes aragoneses declaró que no lo probaría y el 9,1% que sí, mientras que el 30,9% restante ya lo ha hecho.

Otras sustancias como el éxtasis, cocaína, metanfetamina, speed, alucinógenos, setas mágicas o heroína tienen «un consumo residual», ya que sus prevalencias de consumo alguna vez en la vida se mantienen por debajo del 5% sea cual sea la sustancia. «Se trata de los consumos más problemáticos, que quedan perfilados en un porcentaje muy pequeño», apuntó Falo.

DISPONIBILIDAD

Los jóvenes de Aragón consideran que conseguir cualquier sustancia «es más fácil en la comunidad que a nivel nacional». Así, el alcohol y el tabaco son, con diferencia, las sustancias más accesibles para los estudiantes de 14 a 18 años de Aragón. Más del 93% de ellos no aprecia «ninguna dificultad» para conseguirlas. «Estas cifras ponen de manifiesto que las sustancias de comercio legal se perciben totalmente al alcance de los estudiantes que quieran adquirirlas, cuando no deberían ser accesibles para menores de 18 años», puntualiza el documento.

Por su parte, el cannabis y los hipnosedantes también son percibidos como fácilmente disponibles, con un 68% de los jóvenes que considera que «no tendría grandes dificultades» para conseguir cannabis, tranquilizantes, sedantes o somníferos. La percepción de disponibilidad disminuye considerablemente hasta un 35% para lograr cocaína en polvo y hasta el mínimo del 15,3% para el GHB (anestésico depresor líquido)

Respecto a las consecuencias negativas reconocidas por los jóvenes derivadas del consumo de sustancias como el alcohol o el cannabis, la encuesta apunta a la conducción de un vehículo de motor bajo los efectos del alcohol por un 2,5% de los alumnos aragoneses, mientras que haberlo hecho bajo los efectos del cannabis se cifra en un 1,9%. Sin embargo, haber viajado como pasajero, conduciendo alguien bajo los efectos de estas mismas sustancias, se eleva hasta un 17,4% en alcohol y un 9,6% en cannabis. También un 6,4% de los estudiantes afirma haber participado en una pelea, haber sufrido o realizado alguna agresión física habiendo consumido bebidas alcohólicas las 2 horas previas y en un 3% en el caso del cannabis.