UPA Aragón estima que en los cinco primeros meses de 2017 el campo de la comunidad autónoma ha perdido más de 120 millones de euros, especialmente por la sequía, pero también por las heladas y el granizo.

UPA ha expresado hoy en nota de prensa su temor de que la evolución de la sequía y las posibles tormentas de granizo agraven "una situación ya delicada de por sí para los profesionales del campo".

A día de hoy, los daños más importantes se han registrado en herbáceos extensivos, por sequía y heladas, también en explotaciones frutícolas por pedrisco y heladas y en explotaciones de cereza por rajado de fruto.

Según UPA, que cita datos de Agroseguro, en total se han dado parte de siniestros en 73.070 hectáreas, una cantidad, que según recuerda esta organización, se incrementa "hasta más del doble" por todos aquellos agricultores que no tenían seguro contratado.

La provincia más afectada por la falta de lluvias ha sido la de Teruel, donde los agricultores han perdido, siempre según las fuentes, gran parte de las cosechas, lo que en cifras se traduce en cerca de 65 millones de euros.

La siguiente zona más afectada es Zaragoza, donde los daños ascienden a 40 millones, mientras que en Huesca, sin embargo, las pérdidas han sido causadas fundamentalmente por episodios de helada y piedra.

UPA estima que las últimas lluvias han podido ser beneficiosas para los cultivos más tardíos, localizados principalmente en zonas altas.

Pero, como apuntan desde la organización agraria "el problema sigue estando ahí, porque las últimas lluvias no han llegado a tiempo para salvar a muchos cultivos aragoneses fuertemente azotados por la sequía registrada en los meses de abril y mayo"