El derribo de las instalaciones del antiguo cámping Casablanca se inició ayer, de forma anticipada a las obras de urbanización del área sur de Valdefierrro. Con esta decisión, Urbanismo quiere dar respuesta a las reiteradas quejas vecinales por el abandono del lugar, que dio pie a diversos incendios y actos vandálicos en meses anteriores.

Las obras de demolición abarcan al edificio central, de dos plantas, y a otras ocho edificaciones menores de una única planta. Además, está previsto el acondicionamiento, saneamiento y vallado total del recinto, por lo que los trabajos pueden prolongarse en un plazo máximo de diez días, según informaron ayer desde Urbanismo. La pretensión de Urbanismo es que la extensión quede totalmente limpia de basuras y matorrales, rasa y vallada.

La Asociación de Vecinos Aldebarán de Valdefierro acogió con gran satisfacción la noticia. "La medida es muy positiva, porque llevábamos mucho tiempo pidiendo una actuación para evitar incidentes", afirmó ayer Manuel Moreno, presidente de la entidad, quien destacó que se incluya la limpieza del terreno, ya que entre finales de agosto y comienzos de septiembre hubo cuatro incendios, de los que uno se extendió hasta las casas colindantes.

Los suelos del cámping están afectados por el plan especial del sector sur de Valdefierro, que incluye la construcción de 461 pisos libres y 191 VPO. Por otra parte, Urbanismo ultima la tramitación para encargar el proyecto del nuevo cámping.