Representantes de consumidores y usuarios de Aragón se mostraron ayer favorables a que los niños y adolescentes puedan acceder de forma gratuita a las consultas odontológicas, aunque manifestaron sus recelos respecto a que esta asistencia la realicen los odontólogos privados. Un colectivo de 114.000 niños y adolescentes aragoneses entre los 6 y los 17 años podrán acudir a la consulta privada que elijan a partir de la primavera del 2005, gracias al Plan de Salud Bucodental que ultima la DGA en colaboración con el Colegio de Odontólogos de Aragón.

El presidente de OCU-Aragón, José Angel Oliván, calificó como de "muy buena medida" la iniciativa del Ejecutivo aragonés, porque supone ampliar un tipo de prestación sanitaria, que ahora no estaba contemplada. "Además de dar una asistencia se va a trabajar en la prevención y en los hábitos de salud de los más jóvenes, y eso sin duda repercutirá en una mejoría de la salud bucodental de la población en general".

No obstante, Oliván planteó serias dudas respecto a la conveniencia del modelo planteado, por el que los usuarios podrán recurrir a los especialistas privados que deseen acogerse a este plan. "Creemos que este servicio se tendría que homologar con el sistema nacional de salud, porque de lo contrario nos encontraremos con dos modelos sanitarios diferentes".

COSTE DEL SERVICIO Respecto a la posibilidad de que el desembolso económico del Gobierno autónomo fuera mayor en el caso de optar por una contratación masiva de odontólogos para incluirlos en la red pública, Oliván insistió en la defensa de un modelo sanitario público. "Quizás en un primer momento resultara más caro que concertar el servicio, pero a la larga seguro que era más barato. Es algo que se debe estudiar a fondo".

Por último, criticó abiertamente las elevadas tarifas de la asistencia de la odontología privada en España. "No es lógico que sean el doble que en otros países de Europa, con mayor nivel económico que el nuestro. Algo pasa, cuando además no se permite trabajar a odontólogos extranjeros que lo hacen más barato".

Paralelamente, la presidenta de la Asociación Torre Ramona, Olvido Blasco, valoró positivamente la nueva medida pero insistió en que no sólo es el colectivo infantil el que necesita esta oferta sino también muchos ancianos. "Hay jubilados que con una pensión de 60.000 al mes tienen que pagar 200.000 por un aparato dental".

Asimismo, la portavoz de Torre Ramona pidió a la DGA y al Colegio de Odontólogos que sean razonables a la hora de ajustar las tarifas en el futuro convenio. "Salud no puede aceptar que le impongan los precios tan desorbitados que nos cobran los dentistas a la población en general, que son vergonzosos", criticó. Y añadió que con este plan los odontólogos también se están asegurando una clientela fija de adultos.