La Universidad de Zaragoza ha aprobado el nuevo plan de racionalización para la contención del gasto y la obtención de ingresos como continuidad al aprobado en 2012 y que ha supuesto hasta 2015 un ahorro de algo más de 21 millones de euros que aumentará cuando se compute el 2016.

El nuevo plan, aprobado en la última reunión del Consejo de Gobierno, mantiene la misma estructura y los mismos objetivos generales que el iniciado en 2012, aunque se han introducido cambios como los relativos al cumplimiento de normativa en materia de Administración Electrónica y también para potenciar el uso de las TIC, según ha informado hoy la institución académica.

Los compromisos adquiridos por el rector, José Antonio Mayoral, en su programa electoral también están reflejados en esta renovación del plan, de forma que las tarifas de los Servicios de Apoyo a la Investigación se fijarán de modo que se cubran los gastos generados y la aportación de los proyectos europeos a la Universidad se calculará en función de las horas de dedicación de los investigadores.

Otro de los cambios está en las medidas de cierre para el ahorro energético y, en ese ámbito, la Universidad no abrirá este año el Servicio de Registro en sábado, ya que no se considera hábil tras la entrada en vigor de la Ley de Procedimiento Administrativo.

Además, el plan recoge como nueva fórmula para conseguir importantes reducciones en los costes fomentar la contratación centralizada de bienes y suministros en colaboración con otras administraciones públicas.

También se han incluido modificaciones en lo relativo a costes de personal docente y desaparecen del plan algunas medidas pero porque ya se han integrado en la normativa de la Universidad.

Durante la exposición ante los miembros del órgano de gobierno, la vicerrectora de Economía, Margarita Labrador, aclaró que algunas de las medidas incluidas han agotado la capacidad de generar ahorros adicionales y puso como ejemplo las relacionadas con los ajustes de costes de personal, que ya no puede suponer más ahorro y advirtió que de hecho la recuperación de la tasa de reposición implicará un leve repunte de estos costes.

También recordó que continúan vigentes tanto la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera como el plan de racionalización del gasto del Gobierno de Aragón, lo que hace imprescindible que la Universidad mantenga en vigor un plan de racionalización propio que continúe con las medidas de austeridad, ya que si se eliminasen algunas medidas, el campus podría ver incrementar de nuevo sus costes a cotas que no podría cubrir con los ingresos previstos en el actual modelo de financiación.