Un marco normativo que adapte el contrato laboral indefinido para el personal investigador, como existe en Europa, y que el Gobierno español "se crea" la investigación e incremente sus inversiones en este campo son las dos reivindicaciones realizadas hoy por la Universidad de Zaragoza.

El vicerrector de Política Científica, Luis Miguel García Vinuesa, ha presentado en rueda de prensa el balance sobre la investigación del campus público aragonés correspondiente a 2017, donde ha puesto de manifiesto la necesidad de contar con contratos indefinidos para el personal investigador en España, un problema que sólo han resuelto las comunidades de Cataluña y País Vasco.

Además de abordarse esta cuestión en las conversaciones entre la CRUE y el ministerio, García Vinuesa ha destacado su confianza en que la Ley de Ciencia de Aragón "deje claro" si es el Gobierno autonómico o la Universidad de Zaragoza quien tiene la potestad para regular este tipo de contratos.

Ha resaltado también que otro de los problemas a los que tienen que hacer frente las universidades es a la contratación de científicos extranjeros, debido a la equivalencia de títulos, y ha insistido en que, en cuanto a financiación, la "pata que falla" es la nacional, porque mientras Europa sigue apostando por la investigación y redoblando sus esfuerzos, "España no se lo cree y en vez de converger está divergiendo".

Así, ha destacado que la media europea que se invierte en investigación está en el 2 % y que España, que llegó a estar en el 1,3 %, ha bajado al 1,1 %, una "mala noticia" y una "espinita clavada" para los investigadores que querría que mejorara en este 2018 y para lo que hace falta "un impulso político y social un poco mayor".

García Vinuesa ha apuntado que en Reino Unido hay 5.000 investigadores españoles y que ningún país europeo redujo los esfuerzos económicos en investigación durante la crisis.

En Aragón la situación es "todavía peor", con un 0,9 % del PIB destinado a I+D+i, por debajo de la media nacional, y confía el vicerrector de Política Científica de la UZ en que se pueda hacer frente a este reto desde el Pacto de la Ciencia, que espera que "despegue" en este ejercicio, ya que está dotado en los presupuestos, ha dicho.

En el conjunto de los fondos públicos y privados conseguidos por la Universidad para proyectos de investigación, el vicerrector ha resaltado que el campus aragonés logró en 2017 su tercer año consecutivo de recuperación económica tras un periodo de fuerte restricción debido a la crisis económica.

Con 35 millones de euros en 2017, la UZ está todavía "lejos" de los 50 millones que captó en 2008, pero ha subido un 32 por ciento en los últimos tres años cuando se llegó a los 25 millones en 2013.

El campus aragonés obtuvo el pasado año 6,5 millones de euros de fondos europeos para 26 proyectos de investigación, lo que supone un incremento del 27 % respecto al año anterior.

La UZ ha logrado 6,1 millones para 66 proyectos del Programa estatal de investigación del Ministerio de Economía y Competitividad (MINECO), en la convocatoria resuelta en diciembre, lo que la sitúa como la décima universidad de España por número de proyectos.

A nivel autonómico ha obtenido casi 2 millones para los institutos universitarios de investigación y las instalaciones científico-técnico singulares y uno para infraestructuras y equipamientos científicos. Está pendiente de resolver, ha dicho, la financiación para los grupos de investigación (dotada con 3 millones).

García Vinuesa ha resaltado que, por primera vez, el micromecenazgo ha permitido que los ciudadanos colaboren con 100.000 euros para cinco estudios, como el tratamiento de la ELA y las enfermedades raras.

El vicerrector, quien ha apuntado que se ha contratado con estos fondos a 585 personas, un 5 % más que el año anterior, ha resaltado también que la producción científica se ha plasmado en 337 tesis doctorales leídas en 2017 y más de 2.000 artículos científicos publicados en revistas internacionales, liderados por las relativas a Química, Materiales, Nutrición y Física.

Entre los planes de futuro, el vicerrector ha destacado la creación, este año, del Instituto de Patrimonio y Humanidades, que aglutinará a más de 30 grupos de investigación de diferentes especialidades y casi a 300 investigadores que trabajarán en cuatro grandes áreas: Artes, Filología y Comunicación, Historia y Patrimonio Material e Inmaterial.

Ya existe una comisión de trabajo y una memoria y el mes que viene entrará en la fase política antes de que llegue al Gobierno de Aragón y se cree definitivamente este año.

Para 2019 prevé que esté creado el Instituto de Empleo y Competitividad, que buscará centralizar el conocimiento y los avances en investigación relativos a Economía y Empresa, Derecho, Sociología y Lenguas Modernas, entre otras especialidades, desde una perspectiva multidisciplinar y del que formarán parte unos 40 grupos de investigación.

Estos dos institutos de investigación se sumarán a los 9 (cinco propios y cuatro mixtos) con los que cuenta ya la Universidad de Zaragoza.