La Universidad de Zaragoza quiere que el alumnado que reside en los colegios mayores universitarios vuelva a casa por el Pilar y prevenir así contagios de covid-19 vinculados a celebraciones de las llamadas "no fiestas", como ha ocurrido en otras poblaciones de Aragón.

Esa será la sugerencia ante un puente largo en el que no va haber ninguna fiesta en la ciudad, según ha destacado este martes el rector de la Universidad de Zaragoza, José Antonio Mayoral, quien ha apelado a la responsabilidad de los jóvenes ante los casos ya detectados en el colegio mayor Pedro Cerbuna de Zaragoza o en el Ramón Acín de Huesca, aunque no se ha registrado ninguno en los colegios Santa Isabel, también de la capital aragonesa, y Pablo Serrano de Teruel.

En todo caso, Mayoral ha asegurado que cada día se evalúan las medidas a adoptar en los colegios en función de su propia situación -los cuatro colegios dependientes de la Universidad de Zaragoza y los privados tienen reservadas un mínimo del 5 % de plazas para poder aislar estudiantes- y una de las que está encima de la mesa es si se restringen o no las horas de salidas, que no querrían adoptar puesto que muchas de ellas tienen que ver con el propio estudio o la realización de trabajos en grupo.

Ha insistido en que los principales problemas en la Universidad de Zaragoza, con una comunidad de alrededor de 40.000 personas, más de 30.000 jóvenes, como era previsible, se están dando en los colegios mayores y se están tomando medidas, en coordinación con la consejería de Sanidad, con aislamientos o salidas a sus propios domicilios para pasar la cuarentena, si bien no se ha tenido que confinar al completo ninguna aula.

Pero el rector ha insistido en que la universidad no puede controlar al alumnado cuando sale de clase, y de hecho han tenido que pedir la presencia policial en el Campus de San Francisco por algún botellón y en los colegios mayores, donde está prohibido hacer fiestas, algún estudiante ha tenido que dejar su centro temporalmente por actuaciones no permitidas.

Mayoral ha reiterado su llamamiento a los universitarios a la prudencia, porque aunque no tengan síntomas pueden poner en riesgo su formación y la salud de su entorno.

Ha recordado, en ese sentido, el comunicado conjunto del Ministerio de Universidades y la CRUE insistiendo en la necesidad de que los estudiantes mantengan las medidas de precaución. "Son pieza clave -ha remarcado- para que este curso salga adelante sin sobresaltos y que ninguno de ellos tenga disgustos en su entorno familiar de los que luego tenga que arrepentirse por una actitud irresponsable".

"Es el momento de ser cautos, de ser responsables y de trabajar para que esto acabe lo antes posible", ha añadido.

Mayoral ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa para presentar tres proyectos de cooperación al desarrollo en la que la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno de Aragón, Mariví Broto, ha reiterado a los universitarios que su mayor responsabilidad en estos momentos es cumplir con las medidas que exige la pandemia para evitar sobre todo contagios y fallecimientos entre las personas mayores.