Valjunquera tiene agua corriente para tres días. Los dos depósitos de la localidad agotan poco a poco sus reservas, a la espera de que restablezca el abastecimiento de forma provisional. La tubería que llevaba el suministro desde el río Matarraña, de nueve kilómetros, quedó destruida después de las tormentas de la pasada semana. El Gobierno de Aragón aprobó ayer la construcción de una nueva, pero la obra llevará entre dos y tres meses. El coste será de un millón de euros.

El alcalde de la localidad, en la comarca del Matarraña, Ismael Brenchat, mostró su satisfacción por la "rápida" medida adoptada por el Gobierno. "Es un paso importante, mientras intentaremos buscar soluciones aunque sean transitorias", explicó vía telefónica ayer por la tarde. Pasan por intentar aprovechar el agua de un antiguo pozo, que está siendo analizada, o realizar un empalme nuevo desde la rotura de la tubería rota. "Estamos analizando todas las opciones", relató.

Mientras, los camiones de bomberos del parque de Alcañiz abastecen a la localidad, al tiempo que se va consumiendo el agua que queda en los depósitos. "Ayer --por el lunes-- se hicieron ocho viajes, que es el consumo diario del pueblo. Tampoco queremos abusar de este servicio, es algo que no se puede alargar durante mucho tiempo", admitió el alcalde matarrañense.

Ahora el objetivo es que las obras de reparación de la tubería se hagan cuanto antes después de la aprobación de urgencia de ayer en Consejo de Gobierno. No fue la única que recibió el visto bueno. El Ejecutivo también tiene previsto actuar en el servicio de suministro de agua de Ainzón, aunque las obras son menos complejas y costosas --36.000 euros--. El coste será sufragado en un primer momento por la DGA, aunque luego se pasará a Madrid para que lo incluya en sus partidas de ayudas por desperfectos causados por fenómenos meteorológicos.

PRIORIDAD El consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Modesto Lobón, reconoció que la prioridad del Gobierno pasa por restablecer el agua corriente en Valdejunquera, población a la que se está suministrando agua en cisternas, y que, además, impera dar solución a la tubería de 9 kilómetros de la red que se encuentra en mal estado y para la que prevé una inversión de 1 millón de euros y un plazo de ejecución de los trabajos de entre dos y tres meses.

Además, en el Consejo de Gobierno de ayer dio orden, según explicó el portavoz del Ejecutivo, Roberto Bermúdez de Castro, para que la consejería de Economía, con Avalia, busque, si es posible, fórmulas de financiación hasta que las empresas de calzado de Brea de Aragón, en las que entró agua en sus naves, cobren del Consorcio de Seguros las pérdidas ocasionadas.

Bermúdez de Castro enumeró otras de las obras, menores, a las que se dio el visto bueno, y que son de emergencia. Se actuará, por ejemplo, en once carreteras de las Cinco Villas, la comarca de Calatayud y la del Maestrazgo por importe de 350.000 euros. Insistió en que se trata de trabajos "urgentes" que no impiden que se lleven a cabo otros en el futuro. En concreto, se actuará en dos tramos de carreteras de las Cinco Villas --A-1202 y A-127--; ocho de la comarca Comunidad de Calatayud y en la A-1702 en la comarca del Maestrazgo.

El consejero de Agricultura se refirió también a las consecuencias de las lluvias en los cultivos. Los datos que tiene el Gobierno, facilitados por las direcciones provinciales, cifran en 5.600 las hectáreas dañadas por las tormentas en las tres provincias aragonesas, correspondientes todas ellas a cultivos asegurados y a vid, olivo y almendro, cereal, maíz y frutales, principalmente. 1.900 hectáreas corresponden a la provincia de Teruel, 2.300 a la de Huesca y 1.400 a la de Zaragoza.