El valle de Bujaruelo es una zona muy escarpada con gran cantidad de gargantas. En algunas partes, la línea de alta tensión que se encuentra bajo vigilancia por la supuesta colocación de una bomba por parte de la banda terrorista ETA circula por una garganta muy estrecha. En algunos puntos del recorrido, las torres de alta tensión se cruzan por senderos y caminos que van junto al río. La zona más vigilada ayer fue la comprendida entre el Puente de los Navarros y San Nicolás de Bujaruelo, habitual trayecto de montañeros, ya que posee varias pistas forestales de largo recorrido. El albergue del valle es un antiguo caserío, que fue reformado recientemente en un moderno y agradable mesón que cuenta, además, con servicio de bar y restaurante. Fue allí donde se encontraba el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, cuando se recibió la noticia de la existencia de una bomba.