La variante de Jaca ha salido a licitación por un importe de 114 millones. Se trata de una obra de gran importancia, pues esta infraestructura unirá a la altura de la ciudad pirenaica las autovías A-23 y A-21, con lo que se creará un enlace moderno y seguro entre Huesca y Pamplona.

La variante de Jaca contará con cinco viaductos, dado que cruza el río Aragón y el Camino de Santiago en varios puntos. Discurrirá al norte de la localidad, por debajo del hospital, por lo que se prevé una infraestructura para minimizar el impacto en el centro sanitario.

Con todo, tanto la A-21 como la A-23 aún presentan varios tramos en obras en Aragón, en particular en el puerto de Monrepós y en las inmediaciones de Sabiñánigo en el tramo de la Mudéjar. En dirección a Pamplona están operativos dos segmentos, uno a la altura del desvío de Villarreal de la Canal y otro en Sigüés. En Navarra, por el contrario, hace varios años que se terminó la obra.