Algunos empresarios de la construcción muy conocidos en Calatayud se acercaron ayer hasta la calle Justo Navarro para analizar el derribo del edificio. El presidente de la comunidad de vecinos, Juan José Langa, indicó que los técnicos contratados por los afectados ya preparan los detalles de los proyectos para efectuar el derribo, y durante los próximos días se tendrá información avanzada sobre las empresas que podrían llevarlo a cabo, así como un presupuesto estimado de la actuación.

Aunque en los últimos días algunos propietarios han indicado que el coste del derribo iba a superar los 600.000 euros, Langa manifestó que esta es sólo la oferta que apuntó alguna empresa, pero que no hay un "presupuesto definido" y no lo habrá hasta que "los técnicos terminen el proyecto que ahora preparan".

Los expertos han comenzado a agilizar los trámites para que el derribo pueda realizarse en cuanto los pisos hayan sido desalojados, ya que el alquiler y mantenimiento de los puntales que hay instalados ahora mismo es muy costoso, y el ayuntamiento no puede hacerse cargo de éste de forma indefinida.

Ayer coincidieron también en el inmueble los peritos de las aseguradoras que tenían contratadas los vecinos para conocer el estado de las viviendas y las posibles causas que afectaron a la estructura del edificio. Juan José Langa comentó que confía en que se agilicen las investigaciones para determinar las causas de la sima, que serán fundamentales a la hora de establecer si ha habido responsabilidades externas y si se pueden obtener indemnizaciones.