Las asociaciones Amigos de la Tierra, Fondo Natural, SEO/BirdLife y Volunta-Ríos Aragón piden al Ayuntamiento de Zaragoza que no repare la compuerta del azud del Ebro más próxima a Vadorrey, averiada el pasado sábado, y se aproveche para desmantelar el resto y devolver al río su aspecto y función natural. Reclaman además, en un comunicado conjunto, que la gestión del río y de las riberas dentro de las competencias municipales se realice siguiendo los criterios científicos de restauración ecológica.

Según estas organizaciones, la avería de una compuerta del azud de Vadorrey ha devuelto al Ebro sus dimensiones naturales, así como el flujo continuo, que es consustancial a un río. Añaden que se puede comprobar el «devastador» efecto del embalsamiento generado por el azud en la riberas, que aparecen «muertas, ahogadas y enfangadas», así como el «terrible y monumental» impacto que supone el pretendido puerto de hormigón en la ribera.

Los ecologistas mantienen que el azud contraviene la Directiva Marco del Agua y empeora la calidad física, química y biológica del agua, es un obstáculo transversal al río e impide tanto los procesos de depuración natural de las aguas como la dinámica geomorfológica. Y además, añaden, un constante gasto para el ayuntamiento.