En el seno de la Universidad de Zaragoza andan algo mosca desde la semana pasada con la consejera de Ciencia, Universidad, y Sociedad del Conocimiento de la DGA, Maru Díaz. El motivo para algunos quizás no sea muy relevante porque no atañe ni a la oferta académica ni a la financiación ni a la investigación, pero «algo ha dolido» en el campus que Díaz, de algún modo, se haya anotado el punto ante el ministro de Universidades, Manuel Castells, con el tema del Erasmus Rural. «Nos ha sorprendido porque hubiéramos agradecido una llamada comunicando que iba a decir esto», han reconocido a este diario varias personas de la institución académica.

Este programa, que permite a los jóvenes universitarios hacer prácticas y formarse en municipios poco poblados, fue ideado y puesto en marcha por la Universidad de Zaragoza, en colaboración con la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), en junio del 2018.

Cierto es que Díaz, en su intervención en la Conferencia de Política Universitaria de hace una semana en Madrid, citó el «proyecto piloto» puesto en marcha en Zaragoza en su argumento. Pero se echó en falta una comunicación previa al campus. «No gustó» tampoco en la institución académica el anuncio por parte de la DGA de la implantación autonómica de este programa como herramienta contra la despoblación. Y, según ha podido saber este diario, el malestar con este tema también se ha dejado notar en la DPZ. De hecho, este organismo reaccionó apenas 24 horas después del anuncio de Díaz recordando su implicación con el proyecto Erasmus Rural a través de una nota de prensa en la que recordó el plan y el número de estudiantes. Tampoco en la DPZ, al parecer, hubo aviso.

Cátedra

Días antes del anuncio de Maru Díaz, el ministro Castells ya había dicho que entre sus líneas estratégicas está la de repoblar las zonas rurales con universitarios. «Frenar la despoblación y rejuvenecer la composición sociodemográfica» es su meta, dijo. Sus palabras, el 21 de febrero, «sentaron bien» en el campus, porque su idea llegaba hasta Madrid. Sin embargo, esa sensación de satisfacción se rebajó poco después con la «sorpresa» del anuncio de la DGA.

Lo que pretende el Ejecutivo ahora es extender a todo el territorio lo que ya hace, desde hace tres años, la Universidad de Zaragoza y la DPZ. «La cátedra sobre Despoblación y Creatividad es la primera cátedra institucional creada en España con estos objetivos», recuerda a este diario el rector del campus público en funciones, José Antonio Mayoral. «Esta ha realizado numerosas actividades de estudio y difusión, ha publicado libros y su director ha sido uno de los expertos consultados por la Comisión Especial de la evolución demográfica de España, creada por el Senado», precisa Mayoral.

Despoblación

Porque si de algo se sabe en Aragón es de despoblación y ahí es donde quizás el orgullo se ha visto resentido al no haberse consultado con quienes pusieron en marcha el proyecto de Eramus Rural. «La Universidad de Zaragoza está especialmente preocupada por la despoblación del medio rural aragonés», dice el rector.

En el 2018, en su primera edición, hubo 13 estudiantes de prácticas, pero se aumentó a 26 en el 2019. También la dotación económica pasó de 9.000 a 30.000 euros. «Este proyecto, del que nos sentimos muy satisfechos, se extenderá próximamente a la provincia de Teruel, mediante firma de acuerdo con la diputación de esta provincia», cuenta Mayoral.

En el Paraninfo esperan —y confían, dadas las buenas relaciones de los últimos años con el Ejecutivo autonómico— que la DGA les consulte antes de implantar definitivamente el Eramus Rural. A veces una llamada lo puede cambiar todo...