La Asociación de Vecinos del Arrabal va a exigir la intervención del área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Zaragoza en los árboles del entorno del colegio Tío Jorge para garantizar la seguridad de los alumnos. Concretamente, se exigirá la ejecución de podas más efectivas que eviten episodios como el del pasado miércoles, cuando una pesada rama de más de un metro de longitud se desprendió del tronco de un platanero situado en la calle Sixto Celorrio.
Además del tratamiento de los árboles, el colectivo va a reclamar que se soterre el tendido eléctrico que atraviesa sus copas a lo largo de la calle Sixto Celorrio y Valle de Zuriza. "Este tipo de estructuras tendrían que desaparecer del casco urbano de la ciudad para evitar el riesgo de que una rama desplace los cables y caiga sobre los peatones. El cuidado tendría que ser extremo en zonas como ésta, junto a un colegio", dijo el presidente del colectivo vecinal, Rafael Tejedor.
El miércoles no hubo que lamentar accidentes ya que la rama cayó en el interior del parque del Tío Jorge en un momento en el que no había ningún niño en varios metros a la redonda. No obstante, el presidente del colectivo subrayó la importancia de tomar precauciones. "No sólo por posibles golpes a peatones, sino por la posibilidad de que en un día de viento las ramas puedan tirar abajo el tendido eléctrico", apuntó.
Fueron los propios vecinos quienes alertaron a la asociación. Desde allí explicaron que hace años que los padres de alumnos vienen avisando del peligro de los desprendimientos de las ramas. "La mayoría de los árboles están enfermos y en días de viento el riesgo a que cedan aumenta. Es preciso realizar una poda más completa que respete sólo la parte sana", añadieron desde el colectivo.
No es ésta la primera vez que se produce el desprendimiento de ramas pesadas. Cada año caen media docena. El concejal presidente del distrito del Rabal, Ricardo Cavero, ya visitó la zona hace unos meses.
