Un mes sin aceras en la entrada de Movera. Es la situación que denunciar sufrir algunos vecinos del barrio a causa de las obras de construcción de una urbanización en la zona. Las nuevas aceras estarán listas en un plazo breve, pero durante este tiempo los vecinos lamentan la nula previsión para la habilitación de pasos especiales que protejan a los peatones de los vehículos.
"Las obras son en la avenida de Movera, justo a la entrada del barrio. Lo que a nosotros nos afecta directamente es que durante un mes las obras, que empezaron hace más tiempo, han ocupado las aceras", explica Mari Paz, una de las vecinas afectadas, que denuncia "el riesgo diario que conlleva el desplazarnos diariamente por la calzada, porque los coches van a una velocidad excesiva y encima hay una curva que dificulta la visibilidad entre vehículos y peatones".
El malestar vecinal fue transmitido a la alcaldía del barrio rural, que llevó a cabo gestiones con los resposables de las obras. "Compartimos la preocupación vecinal y por eso nos hemos movido todo lo que hemos podido. De hecho, solicitamos a la policía que estuviese presente en la zona a las 9 y a las 13 horas, para controlar el tráfico en las horas punta de los escolares", explica Ismael Abadía, alcalde de Movera, que recuerda que ese refuerzo policial se hizo efectivo tras el atropello hace unos quince días de un señor mayor y su nieto, sin daños graves.
"Sabemos que las obras terminarán en unos quince días y que las nuevas aceras quedarán muy bonitas, pero denunciamos la nula previsión de la obra para la protección provisional de los peatones", afirma Mari Paz, que asegura que la zona es "bastante transitada".
