Los vecinos de los alrededores del Parque Bruil evitaron ayer pronunciarse sobre el estado en el que se encuentra el parque un año después de la riada del Huerva. Tras conocer la noticia de que el consistorio ha elaborado un completo plan de limpieza de las riberas del Huerva que no entra en el parque, los vecinos prefirieron no hacer declaraciones sin antes hablar con la concejala de Parques y Jardines, Isabel López, que es también la presidenta del distrito del Casco Histórico.

Después de denunciar en numerosas ocasiones, la última este fin de semana, el peligro que corren niños y mayores en numerosas zonas del parque que no tienen vallas de protección, la presidente de la Asociación de Vecinos Parque Bruil, Charo Gracia, evitó ayer hacer nuevas declaraciones y señaló que antes quieren hablar con la edil Isabel López.

Ese encuentro se producirá esta tarde, coincidiendo con la celebración de un foro de debate organizado por la Unión de Vecinos Cesaraugusta sobre El Plan Integral del Caso Histórico, su pasado, presente y futuro .

RESPUESTA DE LA CONFEDERACION Por su parte, fuentes de la Confederación Hidrográfica del Ebro, a quien corresponde acometer la obra de la escollera, manifestaron ayer su disposición para asumir su parte de las reparaciones. Además, dichas fuentes también señalaron que en un plazo de tiempo no demasiado largo esperan poder presentar una propuesta conjunta con el Ayuntamiento de Zaragoza y el Gobierno de Aragón para reparar todos los desperfectos que ocasionó la crecida del Huerva en el Parque Bruil.

Según informaron el lunes fuentes municipales, el ayuntamiento no puede reparar las vallas y restaurar el camino que discurre por el parque si antes la CHE no construye una nueva escollera sobre la que fijar estos elementos. Sin embargo, el consistorio también anunció que si esas obras se demoran en exceso, está dispuesto a pedir permiso para realizarlas por su cuenta, aunque previamente ha de pedir permiso al organismo de la cuenca.