Típica es ya la escena de zaragozanos y visitantes comiendo pipas mientras esperan los cortejos procesionales de Semana Santa. Un entretenimiento que este año le ha salido un competidor: Cofrades en Zaragoza; un videojuego gratuito para móviles Android.

La idea nació el año pasado. Daniel Latorre, coordinador de Ámbito Cofrade, y Héctor Plou, que ha desarrollado la app, han sido sus impulsores. «Le lancé el reto y un día me dijo que ya lo tenía todo listo», señala Latorre. El videojuego puede descargarse a través de PlayStore, presente en todos los terminales Android. Hasta el momento ya tienen la aplicación móvil 500 personas.

El usuario que se lo descarga tiene la posibilidad de ir debajo del capirote o tercerol de cualquiera de las 25 cofradías de la Semana Santa zaragozana. Una vez elegido, el reto consiste en procesionar por calles sinuosas y zigzagueantes mientras recoge los estandartes de las diferentes hermandades. Aunque pueda parecer sencillo, es todo lo contrario porque cambia el ritmo, cada vez rápido. Conseguir todos sin llegar a accidentarse es el objetivo.

Los usuarios podrán competir entre ellos, creándose una comunidad de jugadores.

Detalles

Latorre destaca que el «detalle» con el que está realizado el videojuego puesto que, por ejemplo, los cofrades que representan a la cofradía del Silencio no llevan tambores, sino las tradicionales heráldicas con las que procesionan los Jueves y Viernes Santo. La minuciosidad es tal que las hermandades de capa se mueven como si soplara el cierzo mientras procesionan por la capital aragonesa. «Cuando nos juntamos Plou y yo hicimos lluvia de ideas, surgiendo varias como el reproducir también los diferentes pasos y peanas de las cofradías, si bien nosotros no pretendíamos realizar un juego sobre recorridos», señala Latorre.

Y es que los videojuegos de Semana Santa no son una novedad en otras ciudades como Sevilla. Allí se juega al extendido Chicotaz, en el que el usuario tiene que convertirse en un capataz y llevar el paso hasta el final, estando pendiente de árboles o de otros elementos arquitectónicos para no chocar el paso y hacerlo en un tiempo determinado.

En el caso de Cofrades en Zaragoza el juego finaliza cuando los penitentes colisionan contra la pared. En ese momento hay una especie de explosión. Algo que puede ser ofensivo, pero que para Latorre es un «recurso de los videojuegos» que no pretende herir ningún tipo de sensibilidad. De hecho, él no solo coordina la asociación Ámbito Cofrade, sino que también es hermano de El Prendimiento, en Zaragoza.

Latorre considera que la Semana Santa también se puede disfrutar en formato de ocio electrónico y que este videojuego puede acercar a muchas personas a conocer que en Zaragoza se representa la Pasión. Ya hay usuarios de países como Reino Unido.