Hace siete años, disconforme con la evolución de sus dos formaciones de toda la vida, el PSOE y UGT, Julián Castellor decidió romper con ambas y dedicarse a una feliz jubilación, cuidando su huerto, siguiendo la actualidad a través de la prensa y de internet y recuperar la salud que dice que había perdido por "el daño" que le causaba "la deriva ideológica y la corrupción que no se atajaba en los partidos". Castellor había sido un activo miembro de ambas organizaciones. Secretario de UGT en el Alto Aragón de 1978 a 1988, año en que dejó el cargo "porque las personas no pueden eternizarse y hay que renovar", Castellor llegó a ser diputado en las Cortes con el PSOE en 1983, concejal en Huesca y uno de los militantes socialistas más reivindicativos de la provincia.

Ahora, con la salud recuperada y los nuevos bríos que le dieron "movimientos como el 15-M y ver que la gente se organizaba y se comprometía para mejorar las cosas", Castellor ha sido capaz junto a José Antonio Meler de construir una red de círculos en todo el Alto Aragón. Han creado uno por comarca y hay lista de espera.

"No somos cuatro locos, hay un alto grado de compromiso y de preparación en las personas que participan. No hay vuelta a atrás y esto va a cambiar mucho las cosas. El futuro es esperanzador. Solo en la capital estamos más de cien personas muy activas que hacemos muchas cosas cada semana", apunta Castellor, de camino a Castejón de Sos, donde va a fundar el decimocuarto círculo de la provincia. Durante las europeas, este jubilado activo hizo miles de kilómetros de campaña, "de Canfranc a Fraga".

Julián espera expectante la llegada de una nieta, "que se merece un mundo mucho mejor que el que tenemos" y ese es otro de los alicientes que le han empujado "a construir una nueva forma de organización, donde las decisiones las tomen las personas de forma abierta y participativa, lejos de los despachos de los grandes partidos y de las troikas que han marcado nuestra vida", afirma. "En el PSOE, o IU y CHA hay gente maravillosa, pero pinta poco porque sus organizaciones son cerradas y hacen política en despachos. Y ahora la política la van a hacer los ciudadanos, en la calle".