En plena víspera del aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco y del fundador de Falange, José Antonio Primo de Rivera, un capellán de la basílica del Pilar, José María Bordetas, rindió su particular homenaje colocando a la Virgen el manto de Falange Española durante dos horas. El suceso no contó con el consentimiento ni del Cabildo Metropolitano ni del Arzobispado de Zaragoza, que consideró el hecho como «un error lamentable» y pidió disculpas «a la sociedad española y aragonesa», tal y como indicó el portavoz de la institución, José Antonio Calvo.

En este sentido, fuentes del arzobispado señalaron que ante la gravedad del asunto el Cabildo Metropolitano se va a reunir de urgencia para preservar la imagen de la Virgen del Pilar, analizar lo ocurrido y evitar que vuelva a ocurrir en el futuro, para que «no esté a merced de marcas comerciales y partidos políticos». Asimismo, indicaron que el arzobispado «renueva el compromiso para fomentar el respeto a las personas y las libertades en el marco constitucional».

AUSENCIA DEL DEÁN

El capellán José María Bordetas --que nació en la propia basílica y la considera su «casa»-- aprovechó el vacío existente por la plaza vacante de deán para sustituir el manto que hoy lucía la Virgen (el de la bandera de Puerto Rico) por el de Falange, a petición de este partido, ya que es costumbre que aquellas entidades que han donado uno de estos vestidos puedan solicitar que se le coloque.

No es la primera vez que la identificación de la Virgen con la simbología fascista es objeto de polémica, ya que hace tres años exhibió el manto de la División Azul que apoyó a los nazis y que la consideraban su patrona.

Aunque apenas estuvo dos horas, fue espacio suficiente para que la imagen trascendiera y fuera objeto de gran controversia. También en la política. Mientras Falange Española se vanagloriaba del acontecimiento, el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, condenó el hecho por Twitter: «Es una vergüenza y una falta muy grave a la sensibilidad y creencias de miles de vecinos y vecinas de esta ciudad que rechazan de pleno el fascismo». Rápidamente fue interpelado por el portavoz del PP, Jorge Azcón, quien consideró el hecho como un error pero recordó que Santisteve no condenó que «el fascista de izquierdas Willy Toledo» insultara a la virgen. También el concejal popular Sebastián Contín indicó: «La mayor parte de los zaragozanos rechazamos tanto el fascismo como el comunismo. En cambio usted, que gobierna gracias al Partido Comunista, y la semana pasada trajo a una terrorista, asesina de 9 inocentes, para hablar en un edificio público, no es quién para dar lecciones». Por su parte, el edil Alberto Cubero ironizó preguntándole a Azcón si había pasado a besar el manto.