Venía anunciándolo y lo ha hecho. Vox presentó ayer sus alegaciones al presupuesto del Ayuntamiento de Zaragoza en las que incluye severos recortes en las partidas destinadas a la Cooperación y a la Igualdad para crear otras más cercanas a su ideología como una oficina para la atención de mujeres embarazadas y para el servicio de Atención integral para las mujeres pase a ser «para la violencia intrafamiliar».

La formación de ultraderecha presentó ayer 40 enmiendas con las que pretende mover 13,3 millones del presupuesto. Las más importantes son las que tienen que ver con «el planteamiento ideológico del partido» y que vienen impuestas desde Madrid, explicó el concejal de Vox Julio Calvo. Se trata de la partida de Cooperación y el Desarrollo, dotada de más de 2 millones y de la que quieren quitar 1,5 millones para destinarlos al mantenimiento y reparación de la Casa de Amparo y la reforma del albergue municipal. Dos proyectos que el Gobierno de Zaragoza contemplaba iniciar en el 2021. «No es que estemos en contra, es que es el Estado el que debe asumir esta responsabilidad y no el consistorio», especificó. Explicó que, además de que el consistorio no tiene capacidad para controlar el uso de esas cuantías en el país de destino, en Zaragoza hay muchas necesidades que atender primero, como «las familias que viven en pisos apuntalados en Pignatelli».

La formación de Abascal también quiere cargarse la Oficina Técnica de Transversalidad de Género, porque «no tiene sentido» y «se dedica a hacer guías sobre lenguaje inclusivo cuando ya existe un organismo oficial, como es la Real Academia de la Lengua». La Oficina de Igualdad tampoco se libra de sus propuestas de recorte, de la que quieren detraer 250.000 euros para crear otra nueva, la de atención a la mujer embarazada, cuyo anuncio causó cierto malestar entre los colectivos feministas y las formaciones de izquierdas porque, además de que ya existe -lo admitió la propia concejala de Igualdad, María Antoñanzas- cree que lo que pretenden es crear un espacio para las entidades antiabortistas afines. Desde la formación también quieren que parte de esos 250.000 euros se destinen a la ampliación del servicio de atención a las mujeres víctimas de la violencia y que incluya también la «intrafamiliar».

En lo que respecta a convenios y subvenciones, Vox quiere que los recortes del Gobierno PP-Cs vayan más allá, por lo que ha presentado una enmienda para que estos servicios salgan a concurrencia pública. «Nosotros hubiéramos sido más duros», aseguró Calvo. Los sindicatos tampoco salen airosos, ya que para Vox no pueden ser financiados por el consistorio y en este sentido se enfoca su alegación. Sucede lo mismo con los casi 400.000 euros destinados a atender a inmigrantes, que consideran excesivos o que exista una oficina para la memoria histórica.

NEGOCIACIÓN / Tras esta batería de enmiendas toca la hora de negociar. Tanto la responsable de Hacienda, María Navarro, como Calvo coincidieron en que el clima es bueno y que se puede llegar a un acuerdo para la aprobación inicial de las cuentas el jueves de la semana que viene. El concejal de Vox admitió que no han presentado una enmienda a la totalidad (como sí han hecho PSOE y Podemos) porque «la relación es buena y hay voluntad de llegar a acuerdos».

En paralelo, la izquierda hizo lo propio registrando un total de 416 alegaciones, de las que 192 son del PSOE, que quiere mover 34 millones (46,3 con plurianuales), 87 de Podemos, por 19 millones, y 137 de ZeC, por 44 millones. Las tres formaciones coinciden en que la propuesta de presupuestos del Gobierno ha dejado de lado al tejido asociativo y a los barrios de la ciudad y en este sentido van dirigidas sus enmiendas, cada una con sus matices.