Zaragoza acogerá esta semana un foro nacional de agua en el que se debatirán, entre otras cuestiones, las líneas de la nueva política hidráulica que se quiere impulsar en el país. Más de 250 especialistas en gestión tomarán parte en este congreso, que comenzará hoy y se prolongará hasta el próximo viernes.

El VIII Simposio de Hidrogeología se abrirá esta mañana en un acto oficial en el que tomará parte el número dos del Ministerio de Medio Ambiente, el secretario general de Territorio y Biodiversidad, Antonio Serrano. Este alto cargo asumió, tras el cambio de Gobierno central, la compleja competencia hidráulica, que hasta entonces dependía de una secretaría de Estado específica.

Este congreso, organizado por la Asociación Española de Hidrogeólogos en colaboración con la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), reunirá en torno a las mesas de debates a dos centenares de especialistas de todo el país. Las redes de control de aguas subterráneas, la incidencia de la legislación en el agua y el suelo y la explotación de aguas salobres para la desalinización serán temas de discusión.

MODIFICACIONES Pero, además, el encuentro permitirá conocer las líneas de la nueva política del agua que quiere impulsar el Ejecutivo central, dirigidas hacia medidas más próximas a la gestión de la oferta que a la de la demanda.

El encargado de dar a conocer estos nuevos planteamientos hidráulicos será Adrián Baltanás, director general de Acuamed, la Sociedad Estatal de Aguas de las Cuencas del Mediterráneo. Este ente público sustituyó, tras la llegada del PSOE a La Moncloa, a Trasagua, la sociedad creada para promover y construir el macrotrasvase del Ebro. Baltanás dará a conocer las alternativas a la cesión de caudales: desalación, modernización, reutilización y ahorro, fundamentalmente.

Precisamente, Acuamed ha sido dotada en el proyecto de presupuestos del Estado con más de 400 millones de euros, cantidad algo mayor de la que disponía Trasagua y muy superior de la prevista para ACESA, la sociedad estatal de la CHE.