El Real Zaragoza hará los apaños de urgencia previstos en el estadio de La Romareda con dinero de todos los ciudadanos. Así lo ha decidido el equipo de Gobierno PSOE-CHA en el Ayuntamiento de Zaragoza, que prevé firmar en breve un convenio por el que se entregarán 1,5 millones de euros al club deportivo para que asuma la ejecución de las obras de reparación de las instalaciones municipales.

El teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Gaspar, justificó ayer la decisión en la premura de los plazos y en la necesidad de simplificar los trámites, que el club se puede saltar al ser una entidad privada. Eso sí, el edil nacionalista enfatizó que los trabajos están "fijados y valorados" y se acometerán "bajo supervisión municipal". Gaspar señaló que el convenio evitará tener que aprobar un proyecto, un pliego de condiciones y hacer un convocatoria de concurso, trámites que conllevan semanas.

La pretensión oficial de privatizar los arreglos de La Romareda provocaron las críticas del PP y del PAR, que cuestionaron la "improvisación" e incluso la "opacidad" que rodea al expediente.

INFORME DE MAYO El equipo de Gobierno presentó a mediados de mayo el informe sobre las necesidades del estadio, que incluye actuaciones en vestuarios, palcos, aseos y accesos. Estas reparaciones son las mínimas exigidas por la UEFA para las competiciones europeas y deben estar ejecutadas para el próximo agosto, fecha en la que arrancará la temporada futbolística con la Supercopa que se disputarán el Real Zaragoza y el Valencia.

La mayor partida del presupuesto total de 1.520.096 euros se lo llevará la construcción de los nuevos aseos, que costarán 487.000 euros. La nueva zona de atención médica y de dopaje absorberá 148.000 euros y la revisión de accesos y de los sistemas de evacuación del estadio, 130.000.

El informe también prevé mejorar la zona para los medios de comunicación, ampliar el palco de autoridades, así como la zona de palcos y los vestuarios, con 168.000 euros.

Para el portavoz del PP, José Atarés, el equipo de Gobierno ha estado dando "información engañosa" en todo lo relacionado con el estadio para justificar el retraso en la ejecución de las obras.

Por su parte, el edil aragonesista Fernando Arcega manifestó que la tramitación de las obras está rodeada de opacidad. "Cuestionamos que tengan prisas después de mes y medio de advertencias de la oposición y que no convoquen un concurso público. Ahora, deprisa y corriendo, se decide acudir al Real Zaragoza como último recurso", señaló.

Arcega incidió en que no cuestiona la colaboración con el club, una actitud que a su juicio debería extender en consistorio a otras entidades deportivas.

Las mejoras en el estadio se ejecutarán después de que se conozca su futuro, ya que este mismo mes el consistorio se ha comprometido a decidir si lo reforma o lo traslada.