Aragón no es una comunidad en la que la Policía intervenga grandes cantidades de droga como pasan en otras, principalmente con puerto. Sin embargo, la situación geográfica entre Madrid y Barcelona hace que muchos distribuidores sean arrestados en carretera. Estar entre las dos capitales también ha llevado a algunos a establecer puntos de almacenaje en polígonos como el desarticulado hace un año en La Muela con 277 kilos de coca ocultos en pieles.