Más de mil personas inspeccionarán el cumplimiento que se está haciendo de las contratas municipales". Así definió el concejal de IU, Raúl Ariza, el propósito con el que nace el Observatorio de la Contratación implantado por el Ayuntamiento de Zaragoza para vigilar e inspeccionar el buen funcionamiento --y cumplimiento de los pliegos-- de todas las contratas que prestan servicios municipales.

Se trata de un órgano consultivo para hacer "más transparente la gestión y cumplir con los objetivos de eficiencia económica, social y medioambiental", explicó el edil, quien además aseguró que servirá para "genera ahorros" en el gasto del consistorio. Algo que confirmó el vicealcalde y responsable de Economía y Hacienda, Fernando Gimeno, quien compareció junto al concejal de IU para escenificar el cumplimiento del compromiso político con la formación de izquierdas.

Una participación en la que, además de los grupos políticos municipales, estarán representadas las entidades ciudadanas, los sindicatos del consistorio y los comités de empresa de estas contratas, los agentes sociales, las asociaciones de consumidores y los técnicos municipales, para controlar mejor la calidad del servicio que se está prestando. No estarán en este órgano, sin embargo, los directivos de las empresas, que ya tienen, según explicaron, los contratos, las certificaciones y el contacto directo con el Gobierno para hacer valer sus reivindicaciones.

Ariza, además, subrayó que "será a coste cero" para las arcas públicas, de manera que el dinero presupuestado para su implantación se destinará para facilitar la labor de inspección de los técnicos municipales, ya que el ayuntamiento "ha perdido 500 empleados y por ley no se puede contratar a nadie".

Por otro lado, en principio entrarán a formar parte de este observatorio representantes de los trabajadores de servicios como el del mantenimiento de zonas verdes (FCC y Umbela), limpieza pública y recogida de basuras (FCC), transporte urbano (TUZSA), así como de limpieza de edificios o los servicios sociales, pero Ariza remarcó que "está abierto a todas las empresas que trabajan con el ayuntamiento", aunque no tengan representación sindical. Aunque también remarcaron que este observatorio "no será un servicio de mediación" ante posibles conflictos que se generen en el seno de las empresas, como los ocurridos recientemente en la de las zonas verdes o en el transporte.