El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha firmado esta mañana con los representantes de las organizaciones empresariales y sindicales CEOE Aragón, CEPYME Aragón, UGT y CCOO, el Acuerdo Local por el Desarrollo Económico y Social de Zaragoza (ADESZA). Este documento, que tendrá vigencia hasta 2023, es una herramienta con la que se guía el trabajo hacia cinco grandes líneas de actuación: empleabilidad y formación, movilidad sostenible, promoción, desarrollo económico y atracción de empresas a la ciudad de Zaragoza, bienestar y cohesión social y participación institucional.

Azcón resaltó la importancia del diálogo social y de suscribir este acuerdo para el desarrollo económico y social de la ciudad. “Se retoma después de unos años paralizado”, ha indicado, e hizo hincapié en que es una buena noticia que el diálogo social se una a la imagen que “trasladamos de nuestra ciudad y en parte de nuestra comunidad”. “El acuerdo ratifica que lo que eran buenas ideas hace tres meses, hoy son absolutamente necesarias, y si este acuerdo tenía razón de ser, hoy es absolutamente obligatorio” ha remarcado.

Se pretende potenciar la igualdad de oportunidades, promover la conciliación de la vida familiar y profesional, aumentar la empleabilidad de los jóvenes, así como adecuar las acciones formativas a los sectores estratégicos de la ciudad, siempre con la perspectiva de mejorar las competencias digitales y fomentando la colaboración público privada.

El Instituto Municipal de Empleo y Fomento Empresarial de Zaragoza, dependiente de la Consejería de Economía, Innovación y Empleo del Ayuntamiento de Zaragoza, ha firmado un convenio con los agentes sociales para la puesta en marcha del Observatorio de la Empleabilidad. La meta del mismo es incrementar el nivel de empleo, evitando su destrucción y llevar a cabo diferentes estrategias para aumentarlo en la ciudad con acciones conjuntas en orientación, inserción, inclusión y formación.

El secretario general de UGT Aragón, Daniel Alastuey, se ha mostrado satisfecho por llegar a extender al máximo el diálogo social, “creíamos que había que establecer un diálogo fuerte con el Gobierno de la nación, pero el resto de las instituciones también tienen que ser escenario de acuerdo con los agentes sociales”, ha señalado. Manuel Pina, secretario general de CCOO Aragón, ha manifestado que se ha intentado acomodar el acuerdo a las ideas o necesidades del mercado laboral,” que evidentemente van a cambiar y por lo que el laboratorio es fundamental”, ha comentado.

Para Aurelio López de Hita, presidente de CEPYME Aragón, se ha llegado a la fase del compromiso por parte de todos, “porque si falla el compromiso, por muchos acuerdos, los problemas no tendrán solución”, ha subrayado. Y agradeció al consistorio por abrir las puertas del Ayuntamiento que “durante mucho tiempo han estado cerradas" y "no beneficia a nadie”, ha indicado. Ricardo Mur, presidente de CEOE Aragón, ha hecho referencia a que se trata de un "día de celebración", y que este “es un acuerdo para trabajar en pro de Zaragoza en ámbitos que tienen que ver con la mejora de la economía, pero también con la mejora de la ciudad”. “En Aragón estamos siendo ejemplares en el diálogo”, ha subrayado.

El documento es una de las medidas recogidas en el Acuerdo por el Futuro de Zaragoza aprobado en pleno y rubricado el pasado viernes entre el Ayuntamiento y los agentes sociales de la ciudad. “Somos un Gobierno de coalición y en nuestro ADN está el diálogo, el acuerdo, la negociación y el consenso”, ha señalado Carmen Herrarte como vicepresidenta del Instituto Municipal de Empleo y Fomento Empresarial de Zaragoza.

A través del Observatorio se apuesta por realizar un estudio y análisis permanente del empleo en la ciudad, mediante el cual se pueda asesorar al consistorio de la capital aragonesa sobre las posibles líneas de actuación en la acción de fomento del empleo, impulsadas desde Zaragoza Dinámica. Para ello se encargarán de analizar los datos que poseen sus miembros integrantes y difundirlos a través de un informe anual.

La firma de ambos acuerdos ya estaba prevista en marzo antes del comienzo del estado de alarma y se retoma ahora dada su necesidad y adaptándolos a las circunstancias que ha marcado la crisis del coronavirus.