El Paraninfo de la Universidad de Zaragoza acoge la exposición itinerante L’aragonés, un patrimonio común, en la que se trata de dar a conocer la situación actual del idioma en la comunidad que arranca con las primeras evidencias orales que se remontan al siglo VII cuando ya era una lengua consolidada, aunque no fue hasta el siglo X cuando se empleó en textos escritos.

Las primeras palabras escritas en aragonés se remontan a su aparición en Las glosas emilianenses que se encuentran a modo de anotaciones al lado de algunas palabras de textos escritos en latín en el monasterio de San Millán de la Cogolla en La Rioja.

Esta muestra distribuida en tres ámbitos expositivos recala en el Paraninfo con el objetivo de fomentar la diversidad cultural y lingüística de Aragón y propiciar la tolerancia y el respeto a las minorías.

Con la exposición se trata de poner en valor que Aragón, una comunidad en la que además del idioma español también conviven en diferentes zonas de la comunidad el aragonés y el catalán, posee una extraordinaria riqueza y diversidad lingüística, de la que los propios aragoneses «no son totalmente conscientes o no valoran en sus justos términos», según el departamento de Política Lingüística del Gobierno de Aragón, organizadores del espacio.

En la muestra se ponen de relieve los primeros vestigios contando su origen histórico, mostrando documentos escritos desde la Edad Media hasta nuestros tiempos, también se pueden ver algunos documentos inéditos o que nunca han sido expuestos, y que han aflorado durante las labores de preparación. También se hace hincapié en la defensa política del idioma.