El Gordo no quiso quedarse ayer por Aragón --salvo algún décimo perdido que ha hecho más felices a unos pocos afortunados--. Pero, que sí que no , la comunidad fue picoteando de uno y de otro de los grandes premios y al final rascó --de forma directa-- más de ocho millones de euros, a los que hay que sumar al menos otros tantos de pedreas , centenas y similares. Zaragoza fue de sobresalto en sobresalto entre series del segundo, de un cuarto, de dos quintos y del anterior al segundo. La fortuna casi se olvidó de Huesca y de Teruel.

El primer premio del Sorteo Extraordinario de Navidad 2004 salió sin haber dado tiempo a despojarse de los primeros bostezos del día, transcurridos apenas minutos desde que los bombos empezaron a dar vueltas. Era el 54.600, un número que resultó mágico para la localidad leridana de Sort (que, para no variar, copó la jornada), pero que tampoco podrán olvidar unos cuantos aragoneses que habían comprado décimos de ese número.

Como un fontanero de Zaragoza, que tenía once décimos de El Gordo y es, desde ayer, dos millones de euros más rico. O varios trabajadores de la cocina del hospital Miguel Servet de Zaragoza, que han enganchado 400.000 euros --repartidos en ocho participaciones-- por internet.

Fuera de eso, la administración número 41 de Zaragoza había vendido una serie del segundo premio, el 45.564, por lo que ha hecho llegar a unos cuantos agraciados un total de 960.000 euros.

4.000 PREMIADOS En otro de estos establecimientos, el número 29 de la capital aragonesa, sucedió algo curioso: se había distribuido el 45.563, anterior al segundo premio, pero esas cinco cifras habían seducido mucho al comprador y habían salido a la calle 120 series. Al final, más de 2,8 millones de euros que han sentado muy bien por todo Aragón.

Y es que gran parte del premio lo compró la Federación Aragonesa de Coros, que reúne a un centenar de agrupaciones y a unos 4.000 coralistas, según su presidente, Francisco García. Cada uno de ellos tenía, como mínimo, dos participaciones, es decir 500 euros garantizados gracias al sorteo navideño.

Hubo más. Hasta 20 series de un cuarto premio (el 17.275) distribuyeron una lluvia de millones desde la administración 40 de Zaragoza. Más de cuatro millones de euros que viajaron, sobre todo, a los bolsillos de los vecinos del barrio de Torrero.

Y dos quintos: el 7.770 pasó por la administración 43 de la capital aragonesa, que había vendido quince series, que se traducen en 720.000 euros aquéllos a quienes gustó un número tan bajo. Otro quinto premio, el 35.166, pasó por la número uno de Zaragoza, la de Doña Isabel , y dejó 48.000 euros, una serie.

Huesca y Teruel se quedaron a verlas venir . Quince series del 54.601 (posterior al Gordo ), lo que significa 2.000 euros por décimo, vendidas en un bar del municipio oscense de Sabiñánigo. Y una serie del 18.501 (un quinto premio), que dejó en Monzón unos 48.000 euros.

A la localidad turolense de Alacón, el único premio de esta provincia llegó de rebote , pues el propietario del bar Piscinas, José Luis Molina, lo compró en Zaragoza. Precisamente, al lotero que ha repartido el anterior al segundo premio. El cambalache ha permitido llevar la fortuna a los vecinos del municipio y a los de otros cercanos como Obón y Cortes. Un buen reparto, pues eran participaciones de cinco euros.