El Gobierno PP-Cs podría impulsar en esta legislatura un nuevo escenario para celebrar bodas civiles en Zaragoza. El objetivo, aún por perfilar y estudiar, es poder llevarlas al Parque Grande José Antonio Labordeta, y aunque solo es una idea a la que darle forma, se enmarcaría dentro de la actualización del plan director de esta zona verde de la ciudad a la que el equipo del alcalde Jorge Azcón, de la mano de su responsable de Servicios Públicos, Natalia Chueca, quiere darle una vuelta a partir del 2020. Se trata de actualizar una hoja de ruta que no ha dado los resultados esperados, el que presentó el Gobierno socialista hace años no ha cumplido con todas las inversiones que en su día se plantearon, y ahora se pretende dar cabida a otras nuevas iniciativas, entre ellas esta, que añadiría un nuevo recinto a este tipo de celebraciones, que en su mayoría se organizan en el pabellón de ceremonias construido en el 2008 en el Parque del Agua Luis Buñuel.

Lo único que actualmente parece claro es el emplazamiento y las ventajas que tendría este nuevo escenario para bodas civiles. El lugar idóneo, consideran desde el consistorio, sería «junto al jardín botánico», donde ahora se encuentran las oficinas del servicio de Parques y Jardines que, lógicamente, deberán trasladarse a otro emplazamiento. En estos momentos, «no hay nada cerrado ni escrito», puntualiza la responsable de Servicios Públicos, y en el caso de que se trasladaran estas oficinas, «tampoco se ha barajado ningún emplazamiento todavía».

"SI HAY DEMANDA SUFICIENTE"

Respecto a los beneficios de este nuevo pabellón de ceremonias se encaja dentro de ese nuevo aire a darle a este parque, todo un símbolo para los zaragozanos, a través de un plan director que sí deberá responder al principal objetivo que ella se marca: «Queremos poner en valor esta zona verde de la ciudad para que sea una referencia para todos los vecinos de Zaragoza, más vivido y más disfrutado, al estilo del Retiro madrileño, donde hay una riqueza medioambiental y también una oferta cultural y de ocio atractivo». Así expone la concejala lo que quiere que sea un Parque Grande en el que las bodas civiles solo sería un aliciente más, una novedad que, destaca, se acometerá «si hay demanda».

Para ello habrá que analizar el resultado que está dando el pabellón del Parque del Agua, que actualmente acoge «unas 300 bodas al año» de forma regular desde que se estrenó. El Salón de Recepciones de la casa consistorial se ha quedado como escenario muy puntual para este tipo de eventos y hay que analizar si Zaragoza realmente necesita dos espacios o la demanda es insuficiente para mantenerlos de forma simultánea. Aunque es obvio el interés que suscitaría este nuevo espacio para los zaragozanos que quieran casarse, en un entorno tan simbólico y, no hay que olvidar, más céntrico que el Parque del Agua.

De momento toca abrir el debate del plan director en el 2020 y analizar una filosofía similar a la impronta que se le quiere dar a los quioscos municipales, en los que quieren fijar unos «estándares de calidad y unos parámetros estéticos que identifiquen estos espacios como municipales».