El Ayuntamiento de Zaragoza solicitará al Estado un crédito para hacer frente al pago de 36,9 millones de euros en sentencias condenatorias -6,6 en intereses de demora- correspondientes, principalmente, a FCC (11,5 millones) y la antigua TUZSA (17), ahora Grupo Avanza. Un «agujero» que, según la titular de Hacienda, María Navarro, condicionará los presupuestos municipales del 2020 que el equipo de Gobierno comenzará a elaborar en breve.

La cifra no es nueva, de hecho, la propia Navarro denunció y advirtió en varias ocasiones durante la pasada legislatura que esta situación podría producirse y que afectaría directamente a la inversión en la ciudad.

Para poder hacer frente al pago de esta deuda, el Gobierno municipal aprobará hoy en una sesión extraordinaria que se solicite al Fondo de Impulso Económico (FIE) un crédito de 36,9 millones, una herramienta del Estado que permite a las entidades locales captar dinero con condiciones ventajosas. «Esto no es una cuestión de herencia recibida, sino un acto de responsabilidad, los ciudadanos tienen que saber cómo se ha gestionado su dinero estos 16 años de gobiernos de izquierdas», explicó Navarro. Son sentencias que resultaron firmes en la pasada legislatura pero cuyos pleitos comenzaron con el PSOE en el Gobierno. Según Navarro, ZeC ha utilizado la misma estrategía que usó en su día el PSOE, «esconder en un cajón» las sentencias. Ahora, la cuantía «lastrará el futuro de las cuentas municipales» del 2020.

El actual equipo de Gobierno ha dicho en más de una ocasión que la ciudad no iba a poder solicitar préstamo alguno porque incumplía la ratio de endeudamiento para captar deuda -exigencia que lleva el sello de Mariano Rajoy-. Sin embargo, ayer Navarro admitió que no era así y que se cumplía con los parámetros, por lo que el consistorio sí podrá acceder al FIE con el propósito de «poder limpiar lo antes posible los boquetes que nos ha dejado la gestión de la izquierda». Criticó que el predecesor en el cargo, el ahora concejal de Podemos, Fernando Rivarés, no se acogiese al fondo de impulso para este año. En este sentido, Rivarés explicó que el Ministerio de Hacienda no había abierto el plazo para formalizar la petición antes de las elecciones de mayo.

No es la primera vez que Zaragoza se acoge al FIE. Ya lo hizo en el 2015, cuando se solicitaron 45 millones. En el 2016 se requirió un préstamo de otros 45 millones, pero el ayuntamiento incumplía el límite de endeudamiento y se denegó.

Un año más tarde, ZeC requirió de un préstamo de 33 millones y Hacienda aprobó un crédito de 21,1 millones. Por último, el año pasado la ciudad no recibió crédito alguno pues, según Navarro, no se tramitó correctamente. Para el 2019 no se ha solicitado cuantía alguna y, ahora, el PP requerírá al Estado central 36,7 millones, a la espera de que puedan llegar más sentencias.

La oposición acusó a PP-Cs de caer en el «victimismo». Según PSOE, Podemos y ZeC, la cifra no es nueva y el actual equipo de Gobierno ya la conocía antes de las elecciones. El concejal socialista, Horacio Royo, criticó que «escriban una página más presentando la situación económica del ayuntamiento como una catástrofe sobrevenida» y denunció que «a falta de ideas y de proyectos, el Gobierno se ha instalado en la sobreactuación y en la impostura». Desde ZeC, Alberto Cubero acusó a Navarro de hacerse «la sorprendida» cuando durante la pasada legislatura «denunció comisión tras comisión la deuda municipal». Fernando Rivarés, anterior responsable de Economía y ahora concejal de Podemos, insistió en que la cifra no es nueva y que ZeC ya contaba con que había que pagar casi 37 millones por sentencias condenatorias.