El Ayuntamiento de Zaragoza también ha ofrecido emplazamientos municipales al Instituto Confucio, dedicado al aprendizaje y difusión del idioma chino, para que instale en la capital aragonesa su séptimo centro en España. El consistorio, tal y como ya adelantó EL PERIÓDICO, considera que los viejos juzgados de la Plaza del Pilar son el lugar más adecuado para su instalación, pero el edificio es propiedad del Gobierno de Aragón, quien tendría que garantizar su aprobación.

El proyecto se encuentra todavía "en su fase inicial", según apuntó ayer el Ayuntamiento de Zaragoza en un comunicado, aunque "cuenta con el compromiso expreso de las partes". La negociación "no está supeditada al emplazamiento" e implica un diálogo y un proceso a tres bandas, donde el consistorio y la Universidad de Zaragoza asumirían el protagonismo como contrapartes locales anfitrionas, mientras que todavía falta por concretarse la parte de la institución académica china.

La delegación que se desplazó hace unos días a China mantuvo contacto con cuatro instituciones, que se han ofrecido a ser el nexo de unión entre los estudiantes de Aragón y China. Todas están en Zhuhai (Jinan University, Jilin University, Sun Ya Sen University y Gina University) y desde el ayuntamiento esperan que "en las próximas semanas" pueda concretarse el acuerdo.

SORPRESA EN LA DGA La opción sobre que el antiguo edificio de los Juzgados pudiera albergar el instituto Confucio sorprendió en el Gobierno de Aragón, propietario del inmueble. "Oficialmente no se ha hablado de ello y el ayuntamiento no ha trasladado esta propuesta al Ejecutivo", indicaron fuentes del Departamento de Hacienda. Este inmueble, de hecho, es de titularidad autonómica, aunque desde que se quedó vacío la intención de la DGA ha sido siempre acordar su destino final con el consistorio.

Entre las propuestas que se han barajado está la venta para uso particular o la cesión a la Universidad de Zaragoza para crear una residencia de estudiantes y destinar una parte a galería comercial. "Se han barajado muchas opciones desde hace tiempo, pero no hay ninguna firme", aseguraron. "El Gobierno de Aragón está abierto a estudiar cualquier posibilidad que sirva para dinamizar el uso de este edificio, siempre que cumpla condiciones y un retorno social y económico para la comunidad", añadieron desde Hacienda.