El proceso participativo impulsado por el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) tiene muchos elementos que mejorar de cara al próximo año. Esto es lo que se deduce de las conclusiones del informe de evaluación realizado por el catedrático de Filosofía del Derecho y Sociología jurídica de la Universidad de Zaragoza, Manuel Calvo, que dirige la cátedra Participación de Innovación Democrática. Entre las reflexiones, resultado de tres grupos de trabajo, recoge que el proceso «ha sido muy complejo» y que habría que simplificarlo de cara al futuro.

Señala que se ha reivindicado una mayor simplicidad «tanto en el proceso como en las herramientas». Entre sus carencias, destaca la poca adaptabilidad de la metodología a «la realidad». Además de trabajar por llegar a un público joven, ZeC tendrá que buscar el modo de salvar la brecha digital. Según el texto,el gobierno tiene por delante el reto de mejorar la información y la comunicación de cara al próximo año, siendo esta una de las carencias que han destacado los participantes que, también, han resaltado que «no ha funcionado la dinamización del proceso».

Por otro lado, se habla de la ausencia de información técnica. En los tres grupos de discusión se ha coincidido en que los informes presentados por el área de Participación tendrían que haber sido mejor explicados.

En cuando a la distribución económica por barrios, se concluye que la metodología elegida «fragmenta las intervenciones e impide avanzar hacía lo que podrían ser unos presupuestos participativos de ciudad y no de menudencias».

Otro aspecto negativo se centra en la escasa proyección asociativa.