Con el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) ya fuera del consejo de administración de la sociedad Ecociudad, el responsable de Servicios Públicos y Personal del ayuntamiento y alcalde accidental, Alberto Cubero, instó ayer a «su nueva presidenta», la conservadora reyes Campillo, a que sancione a la empresa FCC por los recortes en el salario y en las condiciones laborales aplicadas a los trabajadores del servicio de alcantarillado.

Según explicó Cubero, «unos 300 euros de media» les redujo de media a una plantilla de 48 empleados «al poco de adjudicarle el nuevo contrato», el año pasado. Un incumplimiento de los pliegos de condiciones tipificado como «muy grave» que se le instó a subsanar en un mes. Aún le quedan 14 días, admitió, pero aseguró que «la dirección ha citado a los trabajadores para la primera semana de septiembre», por lo que «no tiene voluntad» de hacerlo.