De puro trámite. Así se puede catalogar el triunfo de ayer del CAI Zaragoza en Pamplona. El equipo de Oscar Quintana consiguió su tercer triunfo consecutivo de la pretemporada, pero lo hizo ante un rival extremadamente sencillo que milita en la Liga EBA, dos categorías por debajo de la LEB. El Alvecón Maristas de Pamplona sólo puso en dificultades al CAI en la primera parte, especialmente en los diez minutos iniciales en los que aguantó el tipo y logró un meritorio 19-19. El conjunto aragonés empezó a despegarse en el marcador, a coger las primeras ventajas conforme se acercaba el descanso, al que se llegó con un 35-44 favorable a los visitantes.

El encuentro, que es un punto más en el rodaje del equipo, dejó un apunte destacado. Por primera vez en toda la pretemporada, Quintana varió su cinco inicial, aunque sólo introdujo una modificación. Lescano, que no había estado bien en los últimos partidos, dejó su sitio a Urtasun, muy regular en este primer mes de trabajo saliendo desde el banquillo. El escolta argentino, un ganador nato, un hombre de carácter, respondió cuando saltó a la pista y anotó 16 puntos.

TERCER PARCIAL El último y definitivo distanciamiento del CAI en el encuentro se produjo en el tercer cuarto, donde el 9-21 acabó por sentenciar el amistoso. Ayer, la pareja de americanos estuvo muy participativa y con la mano fácil de cara al aro: Brown hizo 13 puntos y Reynolds contribuyó con 17. Ferrer también dio un salto de calidad en la anotación con 15 puntos.

Después de jugar contra dos rivales de la Liga LEB (Tarragona y Valls), de medirse a tres de la LEB-2 (Caja Rioja, Guipuzkoa y Guadalajara) y contra uno de la EBA (Alvecón Maristas), el CAI afrontará la semana previa al comienzo de la competición los dos partidos amistosos de mayor envergadura. Y lo hará uno detrás de otro.

El primero de ellos se disputará en Mollerusa (21.00 horas) el próximo jueves. Ese día, el CAI Zaragoza jugará contra el Plus Pujol Lleida de la Liga ACB. Al día siguiente, el viernes 10, el equipo se presentará (21.00) oficialmente en el Príncipe Felipe contra un rival conocido: el Lagun Aro Bilbao, que ascendió la temporada pasada de la LEB a la élite del baloncesto español.