En Badalona y en Madrid, en Santiago de Compostela y en Fuenlabrada, en Valencia y en Vitoria. En todos los rincones de la ACB coinciden en la definición: "El CAI Zaragoza es un equipo competitivo". Lo piensan a pesar de los cambios, pese a todas las novedades, y cuentan con el equipo aragonés para estar entre los mejores. Lo dicen los jugadores y lo corroboran los entrenadores. En apenas dos temporadas, el CAI Zaragoza ha pasado de no contar para nadie --excepto para Abós-- en la encuesta oficial, a aparecer en todas las quinielas como un fijo para la Copa. Ese es también el legado de José Luis Abós.

"Sé lo difícil que es ganar en Zaragoza y que el CAI es un equipo que ha ido de menos a más en los últimos años. Probablemente volverá a estar arriba, si coges una buena dinámica desde el principio es clave para mantener esa buena línea", opina Sergi Vidal, rival hoy con el FIATC Joventut. "Conserva grandes jugadores como Norel, que me encanta, y ha fichado a otros como Robinson, con el que he tenido la suerte de jugar y me declaro súper fan, es un jugadorazo", añade Nacho Martín, exjugador del CAI Zaragoza, ahora en las filas del Estudiantes. El pívot conoce también el banquillo aragonés. "Es un cambio importante, pero Joaquín es también un buen entrenador y espero que le vaya muy bien", asegura.

Otro ex que desea lo mejor al CAI es Alberto Corbacho, uno de los mejores triplistas de la Liga Endesa. "No les he podido ver aún, pero es un equipo que siempre lucha, compite y va a estar entre los ocho primeros seguro. Desde aquí le mando muchos ánimos a José Luis Abós, estaremos con él al 100% y espero que el CAI pueda brindarle una gran temporada", valora el alero. Los cambios son significativos pero, ¿hasta qué punto pueden notarse? "Todo cambio se nota, hay que adaptarse a cosas nuevas, a una nueva filosofía, a nuevos compañeros, y eso suele llevar su tiempo, pero espero que les vaya lo mejor posible", apunta el jugador del Obradoiro.

LA ADAPTACIÓN

Aunque no haya estado nunca en el CAI, también lo conoce Pau Ribas. Compartió equipo en el Prat, el filial del Joventut, con Henk Norel y de verdinegro también coincidió con Pere Tomás, además de compartir vestuario ahora con dos excaístas, Sam Van Rossom y Pablo Aguilar. "Lo veo muy de cerca porque tengo excompañeros, amigos allí, y dos excaístas en el equipo, así que nos seguimos de cerca. Pienso que es el equipo más parecido a nosotros, cada año hace buenas campañas, ficha buenos jugadores, otros se van a grandes equipos y eso demuestra que hace las cosas bien", valora el exterior del Valencia, que no cree que los cambios afecten a la competitividad del equipo. "Cada entrenador tiene su personalidad pero Joaquín lleva tiempo allí, conoce los jugadores, la filosofía. Han cambiado muchos jugadores, americanos, bases, pero el CAI siempre juega bien y puede estar más arriba o más abajo, pero es uno de los referentes de la Liga", añade el jugador de uno de los equipos llamados a intentar romper la hegemonía que, un año más, ostentan el Real Madrid y el Barcelona.

"Es verdad que han hecho muchos cambios, pero el CAI ha sido un equipo competitivo en los últimos años y seguro que éste volverá a competir por estar arriba", dice Thomas Heurtel, base del Baskonia y medalla de bronce con Francia en el último Mundial. Palabras parecidas a las que pronuncia todo un veterano de las competiciones españolas, un jugador que conoce al CAI y al que el CAI conoce muy bien de todo tipo de batallas en la ACB y en la LEB. "El CAI siempre es un buen equipo, competitivo, y volverá a serlo", opina Andy Panko, del Fuenlabrada. Está claro, todo el mundo cuenta ya con el CAI Zaragoza, convertido por derecho propio en uno de los conjuntos que más respeto y admiración despiertan en la Liga Endesa. Una condición efímera que hay que volver a ganarse día a día en las pistas.