Las dos semanas de ausencia de baloncesto nacional tocan a su fin. La Liga Endesa vuelve con más fuerza que nunca para encarar el último tramo de competición donde se decide todo y se ponen las notas de final de curso. Hoy (18.00 horas) en el Príncipe Felipe se miden el Casademont Zaragoza y el Estudiantes en un duelo de máxima urgencia para los madrileños. Con cinco victorias en 21 partidos, este histórico de la ACB está contra las cuerdas, en última posición y ahora mismo a una victoria de poder salvar la categoría. Por ello, el encuentro se revela como altamente peligroso para el equipo aragonés, que hasta el momento conserva una racha intachable en Liga.

Los internacionales regresaron a comienzo de semana ya para trabajar a las órdenes de Porfirio Fisac. San Miguel entró poco a poco debido a unas molestias en la rodilla. Barreiro se ha resentido levemente de su lesión en la cadera. Benzing y Hlinason han llegado algo sobrecargados de sus partidos con sus respectivos combinados nacionales. Todo ello corresponde a gajes del oficio que no impedirán que estén listos para la pelea ante el Estudiantes.

Una de las notas destacables será el flamante fichaje del Casademont para reforzar el puesto de pívot tras la lesión de Justiz. Jason Thompson, con amplia experiencia en el baloncesto europeo y la NBA, ha hecho sus primeros entrenamientos con sus compañeros y llega para ayudar ya al grupo. Sus 2,11 de altura ayudarán a paliar la escasez en el rebote y la intimidación en defensa que pagó el equipo ostensiblemente en su eliminación en cuartos de final de la Copa del Rey. Ya sea desde el inicio o entrando del banquillo, Fisac podrá contar con el americano, que se espera que sea importante de cara al final de temporada.

Esto lo tendrá presente el técnico madrileño Javier Zamora. En enero aceptó el reto de intentar salvar al conjunto colegial, que ahora toma cada encuentro como una final. En el partido de ida, los zaragozanos arrasaron (67-85) y no se dejaron atemorizar por el empuje del WiZink Center. En esta ocasión, el Casademont se enfrentará a un conjunto muy diferente. Los madrileños, sin Darío Brizuela, con los nuevos refuerzos de Jackson y Byron Mullens (no estará en Zaragoza) y con el cuchillo entre los dientes, no podrán las cosas fáciles.

El equipo zaragozano ha tenido tiempo de resetear y renovar los objetivos. Olvidada la Copa, el Casademont tiene por delante unos octavos de final de la Basketball Champions League apasionantes e históricos para la trayectoria del club. En ACB, el equipo continúa tercero y podría cerrar la temporada con una clasificación memorable si aguanta el pulso de los más grandes. Vuelve el baloncesto con el mejor Casademont Zaragoza.