El Casademont Zaragoza afronta una nueva final visitando este sábado al Bilbao Basket (20.45) pero lo hace en mejor disposición que cuando empezó esta serie de duelos ante rivales directos porque el equipo aragonés llega subido en una ola ganadora y claramente mejorado. Así debe seguir para aumentar la distancia con los puestos de descenso y asegurarse los desempates. Ese es el objetivo en Miribilla, dejar atrás a un rival directo.

El equipo de Sergio Hernández ha ganado los cuatro partidos disputados en este 2020. Lo ha hecho porque, en general, ha mejorado su tono defensivo, el gran caballo de batalla de la temporada, y también porque ha destapado al fin todo su potencial ofensivo. Ahora el Casademont anota 96 puntos por partido y eso es muy difícil de superar por cualquier rival.

Esa mejora le ha servido para deshacerse de dos rivales directos en la lucha por eludir los últimos puestos, el Betis y el Fuenlabrada, a los que también ha ganado el averaje. Hoy buscará lo mismo en Bilbao aunque allí muy mal se tienen que dar las cosas para que el equipo no mantenga su ventaja en el desempate porque en Zaragoza ganó por 105-76 en uno de sus partidos más redondos.

El Bilbao, en cambio, no termina de salir de su pozo. Las lesiones le han lastrado todo el curso y no consigue darle la vuelta a la situación. El inicio de temporada, con una victoria en las diez primeras jornadas, lo hundió en la clasificación y la pérdida de piezas clave como Balvin lo ha anclado en el fondo. El conjunto que dirige Álex Mumbrú, que destacó la temporada pasada, es penúltimo con cuatro victorias en 19 partidos, las mismas que Gipuzkoa y Betis. El Casademont le lleva dos de ventaja. En la Champions no le ha ido mejor al cuadro vasco, único participante español eliminado en la primera fase con dos victorias.

Varios han sido los hombres de negro que han caído por el camino. Ya no están en el club Moses y Jones, no volverá a jugar por lesión Rigo, aún no se ha recuperado Balvin y tampoco están Serron y Hakanson. En las últimas semanas han tenido problemas Betolaza, Kljajic y Rouselle, aunque todos ellos podrán estar esta tarde. El club ha intentado solucionar todos esos contratiempos con nuevos jugadores. Primero llegó cedido Kljajic, luego se incorporó Huskic, más tarde Miniotas y, más recientemente, Aminu y Jenkins. Su mejor jugador, por números, sigue siendo Balvin tras nueve jornadas ausente.