Henk Norel no ha empezado bien la temporada, ni por números ni por sensaciones. Al menos, no como a él mismo le hubiera gustado. "Me está costando, no esperaba esto", señala el pívot. No está contento pero sí convencido, de su capacidad y de la del equipo. "Lo único que sé es que he sido uno de los mejores pívots en esta Liga y estoy convencido de que voy a repetir eso", sentencia el holandés, para el que todo lo que hace falta es tiempo. "Trabajo cada día y me encuentro bien, tengo muchas ganas pero necesito un poco de paciencia. Voy cada día mejor y tengo que ir paso a paso", añade.

Norel todavía no es el Norel que deslumbró antes de su lesión, la que le dejó ko al final de la temporada 12-13. El pívot ha sufrido ya problemas en sus dos rodillas. Ahora quiere repetir sus movimientos, recuperar el gancho, adquirir la fuerza y mentalidad necesarias para volver a ganar en el uno contra uno. El miércoles, en Bonn, se empezó a ver algo así. "Por fin", respira, "porque he tenido días de 1/6 y esas cosas, pero lo más importante es que el equipo gane y que conectemos más como equipo. Si hacemos eso, tanto yo como el resto de jugadores lo haremos mejor".

Su presencia en el equipo ha sido irregular, saliendo y entrando del quinteto inicial y con un ajuste de minutos en ningún caso superior a los 16 por encuentro, con Katic y Jelovac relevándole. Su producción ha sido también menor de lo esperado en un jugador llamado a ser referente del juego en el CAI Zaragoza. En el choque ante el Valencia, el día del 1/6 al que se refería el propio Norel, salió tan enfadado con su juego que acabó pateando la valla publicitaria fruto de la frustración.

Pero el holandés no pierde la sonrisa ni las ganas, ni la seguridad en sí mismo y en el equipo, que tampoco ha empezado de forma brillante la temporada. "Aún tenemos que aprender mucho cómo jugar los finales de partido, tenemos mucho margen de mejora tanto individual como en conjunto. La buena noticia es que todos los partidos tenemos opciones de ganar, pero ahora tenemos que ser listos para llevarnos los partidos a casa o, a lo mejor, ganarlos antes de la última jugada", señala el pívot.

Como todo el CAI Zaragoza, señala las pérdidas de balón y las concesiones en el rebote ofensivo del rival como los dos principales aspectos que el equipo debe mejorar de manera más inmediata. Y Norel piensa que todo eso se debe a una sola cosa, a la cohesión como equipo. "Creo que las pérdidas de balón, rebotes... todo esto es la conexión de equipo, que aún no conectamos bien ni en defensa ni en ataque. Tengo mucha confianza en este equipo, tenemos muy buenos jugadores, y creo que vamos a mejorar pronto. Jugamos cada tres días, ahora ante un rival duro, pero todos tenemos ganas de jugar y de jugar bien y de ganar en casa en Liga. Falta nuestro punto de jugar juntos y conectar. Si lo corregimos ya, estaremos bien". Norel está absolutamente convencido.