Quema etapas a una velocidad de vértigo. Da pasos continuamente y siempre hacia adelante. Tiene rendido al Príncipe Felipe, que le reserva siempre la mejor ovación y se frota las manos cada vez que lo ve salir a la pista. Carlos Alocén es, por derecho propio, una de las sensaciones de la temporada del Tecnyconta Zaragoza. Con sus errores, con su margen de mejora, el base zaragozano es, sin duda, un jugador diferente y diferencial, capaz de cambiar partidos, de levantar a su equipo, de dejar con la boca abierta a la grada. La progresión se ve también en sus números. Prácticamente cada semana establece un nuevo récord personal en la ACB. El último, seis asistencias frente al Baskonia.

Una cifra con la que mejoró la de la semana anterior. En el mal partido del equipo en Murcia, Alocén repartió cinco asistencias. Contra el Baskonia hizo una más y volvió a ser el dinamizador del equipo saliendo desde el banquillo. Además, alcanzó de nuevo los diez puntos y capturó dos rebotes. Sus máximos los estableció ante el Tenerife, hace cuatro jornadas. Entonces disputó 24 minutos, su máximo en Liga Endesa, superando los 22 jugados contra Unicaja en la 2017-18. En esos 24 minutos alcanzó también su tope anotador con 18 puntos, mejorando los 15 que había logrado frente al Divina Seguros Joventut.

En estos meses de competición se ha notado también una gran evolución en su capacidad anotadora, sobre todo en los lanzamientos de tres, quizá uno de sus debes al comienzo del curso. Precisamente contra el Tenerife logró su récord al anotar cinco triples en siete lanzamientos. Tras empezar la temporada con unos números muy bajos en ese apartado, en la actualidad promedia un 44% de acierto desde el 6,75, lo que le convierte ahora mismo en el anotador con mejor porcentaja de tres de la plantilla del Tecnyconta. No para de crecer.