Cuando las piezas encajan en un equipo, se nota. Y las cosas comienzan a funcionar. Así le ha pasado al Casademont Zaragoza desde la llegada de Sergio Hernández, aunque al argentino le costó algo adaptarse. Desde que el técnico está en Zaragoza, casi el 62% de los resultados han sido victorias. Por el contrario, con Diego Ocampo fueron favorables el 44% de los encuentros, todo esto entre la Liga Endesa y la Basketball Champions League (BCL).

Pero es que especialmente en los últimos encuentros el equipo está imparable. Solo un rival ha conseguido batirle en todo el 2021, y ya hemos entrado en el tercer mes del año. Fue el TD Systems Baskonia. Ningún otro. Lo que significa nueve victorias acumuladas en diez partidos. Un 90% de efectividad que no es comparable a ninguna otra estadística anterior.

Cuando peor estaban, los del Oveja supieron reponerse para salir de esa zona baja que tanto llegó a asustarles. Vencieron a todos sus rivales directos, empezando por el Real Betis. En la Champions aseguraron el pasar de ronda como primeros de grupo con las victorias ante el Nizhny Novgorod y el Start Lublin. Todo tomó una nueva dirección para seguir trabajando y poder luchar por objetivos más ambiciosos en un año que parecía encaminado a salvar la categoría como meta principal.

Durante los partidos de esta temporada que se disputaron en el 2020, el equipo acumuló una estadística del 33% de victorias, durante 21 partidos. Esto se traduce en que ganó siete veces. Al Start Lublin, el Nizhny Novgorod y el Falco en la ida de la BCL; y al Herbalife Gran Canaria, al UCAM Murcia, al Morabanc Andorra y al Bilbao Basket en la Liga Endesa. Más fácil enumerar a los equipos contra los que ganaron que contra los que perdieron. Ahora las tornas han cambiado.

Después de 22 días de parón, el equipo volvió para ganar al Betis (82-85) en Sevilla y, sin pasar por Zaragoza, viajar a Italia para jugar la BCL. El del Oveja es un equipo ganador. Y lo es porque las piezas, al fin, han encajado. Por la reestructuración de la plantilla y la lucidez de algunos de los que ya estaban. Por ejemplo, la de Barreiro, que en el último encuentro anotó 26 puntos y lideró al equipo. También Sulaimon, que regresó después de la lesión en la mejor de sus versiones.

No hay que olvidarse de las incorporaciones al equipo en este nuevo año. Las llegadas de Harris y Wiley han sido las más acertadas del curso. Tanto en nivel como en lo que a rápida adaptación se refiere. Ambos han dado un plus al equipo. El último en llegar, que prácticamente no ha pasado por Zaragoza (llegó un día antes de partir hacia Sevilla), ya ha aportado en sus dos encuentros puntos, intensidad e intimidación en defensa.