Jason Thompson no volverá después del parón. El pívot norteamericano solicitó su desvinculación del Casademont Zaragoza, según el club por «motivos personales», para regresar a la Liga china, esta vez con los Shanghai Sharks. El rendimiento del jugador, lejos en muchas ocasiones de su verdadero potencial, le ha puesto en la picota en varias ocasiones y su salida ha planeado sobre el equipo en los últimos meses, pero finalmente no se ha producido hasta que el jugador ha encontrado una oferta en firme para salir. Es la segunda salida en el Casademont en menos de 48 horas, después de que el domingo por la noche se oficializara el adiós de TJ Bray, que ya es jugador del Panathinaikos.

Thompson, de 34 años, pone fin así a su segunda etapa en el Casademont. El jugador llegó hace poco más de un año, a finales de febrero del 2020, procedente de China para suplir a Javier Justiz una vez que al cubano no le quedó más remedio que pasar por el quirófano para operar su maltrecha rodilla. Apenas le dio tiempo a debutar cuando el coronavirus lo paralizó todo y obligó a confinar a los equipos. En abril, tanto él como DJ Seeley solicitaron al club regresar a su país ante la situación mundial.

En verano el Casademont volvió a apostar por él para confeccionar su nueva plantilla, con Justiz todavía pendiente de su total recuperación. Fueron movimientos seguidos en el tiempo, hubo primero un acuerdo con Thompson y, dos días después, otro con el cubano para ampliar su contrato tres temporadas más. Esta campaña ha disputado 17 partidos de Liga en los que ha promediado 8.2 puntos y 5.1 rebotes en 18.20 minutos de juego. En la Basketball Champions League han sido cuatro los encuentros (en uno dejó su ficha a Justiz y, en el otro, ya estaba lesionado) promediando 16 puntos y 6.2 rebotes en 23 minutos. El 16 de enero se anunció su baja entre cuatro y seis semanas por una lesión muscular en el gemelo derecho.

Su juego ha estado casi siempre lejos de su mejor nivel. Sus enfados por las faltas pitadas o dejadas de pitar le descentraban con demasiada facilidad y le llevaban a cometer errores. No obstante, también ha dejado partidos notables, en los que fue decisivo, y Sergio Hernández ha expresado públicamente en alguna ocasión que estaba satisfecho con su actitud y trabajo diarios. Su salida permite al Casademont liberarse de una de las fichas más altas, aunque ya sondea el mercado en busca de alguna opción que le pueda encajar, sobre todo económicamente.

Tras TJ Bray

Ahora, tras la salida casi consecutiva de TJ Bray y Thompson, la plantilla del equipo se queda con 12 jugadores en lugar de los 14 que llegó a tener inicialmente, por lo que no necesita hacer ningún descarte. Además, con el regreso de San Miguel cuenta con los cinco cupos necesarios en la Champions, por lo que tampoco necesitará completar el roster con canteranos. Y a la hora de fichar tiene todo el mercado abierto. Sin el base ni el pívot el club ya solo cuenta con una ficha de extracomunitario, la de Justiz, que sigue pendiente de poder jugar como español más pronto que tarde, por lo que puede incorporar a cualquier jugador.

Jason Thompson regresa ahora a China, donde ya estaba desarrollando su carrera antes de recalar en el Casademont. Después de ocho temporadas en la NBA, siete en Sacramento, quien le había drafteado en dudodécima posición en el 2008, y otra en Golden State y Toronto, el pívot se marchó al Shandong antes de su única experiencia europea en el Fenerbahce. Después jugó también en el Sichuan y el Beijing antes de recalar en Zaragoza, donde ha estado en dos breves etapas. Ahora le esperan los Shanghai Sharks.