El Barcelona dejó KO al Tecnyconta en el primer asalto de semifinales. No le dejó respirar, anuló su juego y le obligó a hacer el peor partido de los últimos meses. Pero esta noche llega el segundo asalto y el Tecnyconta Zaragoza no tiene otra que levantarse y volver a competir. Como lo ha hecho hasta ahora. Como ha llegado hasta aquí. La dificultad vuelve a ser máxima, pero la eliminatoria no ha hecho más que empezar y solo va 1-0. Y si algo ha demostrado el conjunto de Porfirio Fisac este año es coraje, ambición y rasmia. Todo eso necesitará, para empezar, esta noche en el Palau (21.00 horas).

Sin tiempo para lamentarse ni para lamerse las heridas el equipo aragonés debe presentar de nuevo su mejor cara y buscar cómo acercarse a un Barcelona tan físico, tan competitivo, tan avasallador. Los azulgranas no dejaron ni una rendija en el partido del viernes, señal de que habían estudiado al milímetro al Tecnyconta, de que lo consideraron un rival peligroso, de altura, al que no había que concederle nada. El Barcelona ofreció su mejor versión, sin dudas ni titubeos, y el Tecnyconta no pudo llegar a ese nivel. Por si quedaba alguna duda de la ambición azulgrana, nada más ganar el partido Svetislav Pesic dijo que sí, que estaba muy bien, pero que quería viajar a Zaragoza con el 2-0.

El Tecnyconta tendrá hoy, además, la duda de Bo McCalebb, que terminó el partido con problemas físicos. Aunque Porfirio Fisac dejó su participación en el aire pendiente de la evolución de sus molestias musculares, el base solo ha tenido un día para recuperarse y parece complicado que pueda ayudar al equipo. En cualquier caso, lo que reclama Fisac a sus jugadores para el duelo de hoy es que sean ellos mismos, que se reconozcan en el equipo que tantas alegrías ha dado a la afición esta temporada, que mantengan la idea de juego que les ha traído hasta aquí. Una afición que, por cierto, no dejó solo a su equipo. Los jugadores salieron tras el partido a agradecerles su apoyo y los seguidores aún les esperaron a la salida del Palau para seguir animándoles. Es lo que se han ganado.

La plantilla apuesta por levantarse. «Te vas jodido al hotel, cenas y te duele, te vas a la cama caliente por lo mal que has jugado. Pero mañana (por ayer) te levantas, te vas a entrenar, lo olvidas y el domingo te levantas y es otra oportunidad», explicó Nacho Martín. El ala-pívot apuesta por hacer borrón y cuenta nueva intentando corregir errores. «El domingo a empezar de cero, plantarles cara e intentar sacar un partido aquí», añadió.

En la misma línea se expresó otro veterano, curtido en mil batallas. «Estamos todos tocados ahora, ningún jugador ni equipo quiere perder así. Es un uno cero y si queremos igualar la eliminatoria tenemos que ser igual de físicos que ellos», apuntó Fran Vázquez, que tiene claro lo que quiere para hoy: «El domingo se tiene que ver el equipo de toda la temporada». Los dos elogiaron a la afición. «Han estado todo el partido animando, incluso cuando no había nada que hacer. Tenemos que agradecerles que hayan venido y a la gente que repita el domingo o venga nueva, intentar brindarles un buen partido y una gran imagen», dijo el pívot.