El grupo D, en el que compite el Casademont Zaragoza, es el más igualado de la Champions League. Al término de la primera vuelta, una victoria separaba al líder del segundo, tercero y cuarto, y otra a estos del quinto, sexto y séptimo, mientras el colista estaba otra por debajo. Así que el equipo aragonés debe aprovechar los dos partidos consecutivos que le quedan en casa para dar un pequeño salto e intentar destacar entre tanta paridad. El primero, este miércoles contra el Telekom Bonn (20.30 horas), ante el que también entra ya en juego el average. En la ida, el equipo alemán ganó por 14 puntos.

El conjunto que dirige Porfirio Fisac llega pletórico tras sus últimos resultados cosechados. Tras el subidón del triunfo ante el Real Madrid sobrevivió a dos prórrogas frente al Brindisi y el domingo asaltó el WiZink Center para superar al Estudiantes. Suma 13 victorias en 19 partidos oficiales, es tercero en la Liga Endesa y con todo abierto en Europa, donde aún no está clasificado pero tiene opciones incluso de acabar primero. Una situación idílica solo rota por los problemas físicos que no abandonan al equipo.

Esta vez son tres los jugadores que llegan tocados, porque Seibutis, que sigue su proceso de recuperación, es ya una baja habitual. Todavía no ha debutado esta temporada. Además del lituano, llegan con problemas Carlos Alocén, Rodrigo San Miguel y Fran Vázquez. Los dos primeros, tras los golpes sufridos el domingo. El gallego porque reapareció el fin de semana y hay que comprobar su evolución. «Carlos tuvo un pequeño percance en el tobillo y está pendiente de evolución, ayer -por el lunes- no pudo hacer nada y está entre algodones. Rodrigo tampoco pudo hacer nada ayer. Fran va en su proceso de evolución y veremos si puede ayudarnos o no el miércoles. Reno sigue con su proceso», relató Sergio Lamúa.

Esos problemas, sobre todo porque afectan a los dos bases titulares, modifican el planteamiento del equipo y pueden alterar el plan de rotaciones de Porfirio Fisac. «Vamos a ver, la rotación cambiará seguro, son jugadores que llegan entre algodones y que veremos si pueden ayudarnos y cuánto. Es fundamental cambiar las rotaciones y dar descanso de minutos a algunos jugadores importantes. Es mucha la carga de juego que tienen algunos y eso va a ser así. Vamos a ver en qué medida cambiamos la rotación», añadió Lamúa.

El Casademont Zaragoza arranca la segunda vuelta de esta primera fase ante el Telekom Bonn, al que ya se enfrentó en sus participaciones en la Eurocup, con la ventaja de conocer de primera mano a sus rivales. El conjunto germano no está tan en forma como el aragonés, al menos es lo que dicen sus resultados. Este fin de semana logró una contundente y clara victoria ante el Syntainics (colista) por 103-85, rompiendo así una racha de seis derrotas consecutivas. Es decimocuarto en la clasificación con dos victorias y siete derrotas, aunque con un partido menos que la mayoría de sus rivales e incluso dos menos que algunos. La Bundesliga es impar. En Europa, en cambio, goza de mejor salud y de las mismas victorias que el Casademont, aunque hace una semana le sorprendió el PAOK en casa. Es hora de dar un paso más.