--¿Necesitaban una victoria como la de Bilbao después de una semana complicada?

--Sí, este partido era clave para la Liga y sabíamos que teníamos que ganarlo. Era una pista muy complicada pero empezamos muy fuerte y esa fue la clave, empezar fuerte desde el inicio, coger ventaja y mantenerla hasta el final. Esos partidos cuanto te vas de bastantes puntos luego te recuperan y siempre es complicado. En esos momentos clave del partido supimos reaccionar muy bien.

--¿Cómo se explica que en siete días pasaran de caer en casa del colista a vencer a una de las revelaciones de la Liga?

--Teníamos un problema claro que era el rebote, nos cogían muchos rebotes ofensivos. Cuando pasa esto cada rebote es una segunda opción y si el otro equipo tira muchas más veces a canasta tiene más opciones de ganar. Sabíamos desde el principio de temporada que ese era el problema pero no había manera de solucionarlo y en Bilbao estuvimos muy bien en ese aspecto y por eso controlamos el partido.

--Dominaron el rebote a pesar de los problemas interiores.

--Como esto es tan duro, es una lástima que en muy pocos partidos todo el mundo pueda estar al 100%. Siempre hay alguna molestia, alguna baja, pero pienso que los que estuvimos dimos un paso adelante para ganar el partido. El rebote parece desde fuera que es cosa de los interiores, pero yo pienso que es cosa de todo el equipo. Si todos cerramos el rebote todos podemos cogerlos y ayudar en ese aspecto.

--Fue su mejor partido con el CAI. ¿Lo sintió así?

--Esta temporada la verdad es que no estaba nada acertado en ataque, no estaba jugando como me gustaría. En Bilbao por diferentes razones tuve más minutos y los pude aprovechar. Intenté hacer lo de siempre, ir al rebote siempre, defender, pero también tuve más tiros y pude anotar más. Son sensaciones durante el partido. Empecé recibiendo muy buenos pases de mis compañeros y anotando más de lo habitual. Cuando eso pasa tienes más confianza para seguir intentando tiros pero yo la confianza siempre la tengo, lo que pasa es que hay días que no me entraban y el otro día sí. Estoy contento por mi partido pero lo más importante es la victoria.

--¿En Bilbao se vio al Pere Tomás que a usted le gustaría ser?

--Está claro, a mí me gustaría jugar bien siempre. A lo mejor esta es la línea que tengo que seguir, pero sobre todo ayudar en el rebote y en defensa. Luego en ataque intentar tener esos tiros abiertos y que me entren. A ver si me da confianza y puedo recuperar mi mejor nivel porque no lo tenía hasta ahora.

--¿Necesitaba más minutos?

--A todo el mundo le gusta jugar. En Bilbao los tuve por la baja de un compañero, que es algo que nunca gusta, e intenté dar el máximo. Pero esto es cosa del entrenador, yo trabajo cada día al máximo para los minutos que juegue, darlo todo. Hay cosas que son ponerle ganas, ir, estar siempre al 100%. Si no estás acertado en ataque hay que intentar al menos ayudar al equipo en defensa y en rebotes.

--El CAI mejoró el rebote pero también el juego ofensivo.

--Jugamos un gran partido, tanto en defensa como en ataque. Para mí controlamos los 40 minutos y eso es muy difícil porque tienes que estar acertado atrás y adelante.

--¿Es normal la irregularidad del equipo con tanto cambio?

--Cuando el equipo se hace totalmente nuevo siempre cuesta que todo el mundo se conozca, que cada uno coja su rol. Se ha cambiado a muchísima gente pero creo que poco a poco estamos consiguiendo ser lo que queremos ser. Hemos tenido bastantes altibajos y a ver si podemos coger una línea de trabajo y que sea la habitual. Que los días que no estemos tan acertados podamos controlar el rebote y las pérdidas, que era otro de los problemas. Si controlamos estas dos cosas se puede ganar aunque no tengas tanto acierto.

--¿Qué opciones tienen en París?

--Los partidos fuera están muy caros pero sabemos que tenemos opciones y hay que ir a por ellas. Hay que intentar ganar porque el grupo está muy igualado y una victoria te pone otra vez arriba y una derrota te deja abajo. Es clave ganar fuera.