Trece de los quince jugadores del CAI Balonmano Aragón tuvieron ayer la primera toma de contacto con el equipo antes de sudar la camiseta. Sólo faltaron Iván Aranda y Gonzalo Navarro, ambos con permiso del club. Por la mañana, comenzaron los reconocimientos médicos, que continuarán a lo largo de la semana, y por la tarde se encontraron en La Granja para presentarse y conocerse entre ellos y efectuar las primeras carreras. Durante los próximos días tendrán doble sesión de entrenamiento, de mañana y tarde, hasta el viernes, cuando viajarán a Senegüé, en el Pirineo, para concentrarse durante ocho días en los que se aumentará la carga de trabajo hasta las tres sesiones diarias en el pabellón polideportivo de Biescas.

"Hay mucha gente nueva en el equipo y cinco jugadores extranjeros, por lo que es importante hacer grupo y que todos se conozcan. Además, estando todos juntos podremos trabajar con más intensidad", explica Fernando Bolea, que dirigirá una temporada más al equipo, sobre la concentración de la próxima semana. El CAI Aragón se ha reforzado con ocho jugadores, lo que supone que más de la mitad de la plantilla será nueva la próxima campaña, en la que el objetivo del club no es otro que ascender.

RESISTENCIA AL PRINCIPIO La preparación del equipo comenzará por la resistencia para ir cambiando conforme los jugadores mejoren su tono físico. "Habrá un poco de todo, tendrán que correr, cogerán el balón, harán pesas...", comenta Bolea, que observará estos primeros días la forma en la que llegan sus pupilos de las vacaciones. "Confío en que habrán hecho los deberes", dice el técnico, añadiendo que la preparación durante agosto ha de ser dura y exigente porque el CAI tiene que llegar muy fuerte al comienzo de Liga, donde le esperan el Grupo OPM, el Barakaldo, el Ciudad de Logroño y el Pilotes Posada durante el primer mes de competición.

Esa preparación incluye diez encuentros, el primero el 19 de agosto ante el Forcusa Huesca en el pabellón de La Granja. Los oscenses han alcanzado este año la misma categoría que el CAI, por lo que este primer derbi puede significar un buen punto de arranque para comprobar el estado de ambos, que volverán a enfrentarse el 2 de septiembre en Huesca. En la Liga se cruzarán en la jornada 14, el 16 de enero, y en la penúltima, el 8 de mayo.

La pretemporada continuará con los encuentros ante el Weimar Villa de Aranda el 21 de agosto en Tarazona, frente al Ciudad de Logroño el 26 de agosto en La Granja y contra el Barakaldo el día 28 en Ejea, aunque podría cambiar la sede. Tras el segundo encuentro ante el Forcusa Huesca, disputará un torneo cuadrangular en Cuenca los días 4 y 5 de septiembre junto al equipo local, el Valencia y el Altea. El día 8 volverá a enfrentarse al Ciudad de Logroño en Logroño y el día 11 se presentará en Teruel ante el Valencia en el Trofeo Dinópolis. Durante el mes de septiembre, los entrenamientos se realizarán en Zaragoza, aunque la cantidad e intensidad de los mismos se determinarán en función del estado de forma de los jugadores.